Narra Claire.
1 semana donde he estado ignorando a todos, sin salir del departamento y viviendo de comida a domicilio. Lo más seguro es que subí los 2 kilos, y tal vez un poco más, que había bajado con la dieta que mamá me obligo a seguir.
Me agradecía mentalmente de haberle hecho caso a Nicholas sobre no invitar a mi madre a la prueba de vestido, la cual por cierto, era mañana.
Necesitaba un poco de tranquilidad después de aquel suceso con mi padre y su hermano. La única manera de no decirle lo que había pasado a alguien era esconderme por un tiempo de las personas en general.
No era la primera vez que vivía este tipo de situaciones. Asistí años a terapia para poder superar mi trauma y poder tener una vida, tanto social como sexual, como una persona normal y lo había logrado.
Ya no era un problema para mi o bueno, al menos, ya no evitaba todo contacto con los hombres.
Estaba sentada en el sofa leyendo un libro cuando el timbre sonó. Mi celular vibro y era el repartidor avisando que mi pedido llegó.
Deje el libro a mi lado y me levante, arrastre mis pies hasta la puerta y al abrirla me sorprendí al ver a Nicholas frente a mi con mi pedido colgando de su mano.
— Buenos días, Bella —enarca una ceja —. O debería llamarte, ¿chica desparecida?.
Solté un suspiro e intente tomar la bolsa, pero rápidamente la levanto.
— Te dare esto si me dejas entrar.
Me hice a un lado y entro viendo todo a su paso.
Todo mi departamento estaba totalmente ordenado y limpio, me tenia que entretener en algo además de solo ver series o leer libros.
Cerré la puerta y voltee hacia el mordiendo mi labio inferior avergonzada. Dejo la bolsa sobre mi mesa de centro y se quito la chaqueta de su traje. Me acerque y estire la mano para recibirla, pero el fue al colgador en una esquina y la puso ahí dejándome con la mano estirada.
Baje mi brazo lentamente y lo mire con una mueca.
— ¿Cómo supiste donde vivía?
— Connor. —se arremango las mangas hasta los codos y aflojo su corbata —. ¿Sabes? Llevo días intentando comunicarme contigo y ayer cuando me entere que no le contestabas ni siquiera a tu hermano, supe que tenia que venir —me mira serio —-. Y saber, ¿Por qué mi prometida ignora a todo el mundo y se esconde en su departamento por toda una semana? —frunce el ceño ligeramente.
¿Por qué se preocupaba si lo nuestro era solo por un contrato? Ni siquiera eramos amigos.
— Yo... Solo necesitaba un poco de espacio —bajo la mirada —. Pase por un momento de mucho estrés, lamento si te preocupe. No tienes que... —me interrumpe.
— No termines esa frase, Claire —gruño.
Asentí sin mirarlo. Escuche sus pasos y supe que estaba frente a mi al ver sus zapatos frente a mis pies descalzos cubiertos solo con mis calcetines de colores diferentes.
Toma mi mentón y lo levanta hasta que nuestros ojos se unieron.
— ¿Estas bien, bella? —pregunta con una voz suave.
— Si —asiento.
Me miro directamente por unos segundos y entrecerró los ojos, pero no insistió.
— Ponte algo cómodo para salir y desayuna, iremos a ver la casa.
— Esta bien.
Fui a mi habitación y me vestí con algo más apropiado. Jeans negros tiro alto acampanados estilo retro, una camiseta corta ajustada de manga corta color azul claro y un hoodie con cierre color negro.
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Cicatrices Del Pasado
RomanceLas familias Bonnet y Ricci deben cumplir estrictamente las condiciones que los abuelos dejaron en su testamento para recibir sus herencias. Una de esas condiciones involucra un matrimonio arreglado entre las familias. El matrimonio entre Claire Bon...