Tanto sus padres como sus hermanos lo observaron aturdidos, sin poder creer lo que él les estaba contando.
—No tengo mucha más información de la que les he dado, sólo sé que ella es nuestra hermana, y claro, su hija.
—¿P-Pero cómo? —preguntó Rose, sintiendo sus ojos cristalizarse—. ¿E-Entonces tiene la edad de Ari?
—Eso parecía en la imagen que ví —explicó Kyle—. Pero no sé realmente cuántos años tenga, ni cómo fue creada, la única certeza que tengo, es que es hija de ustedes dos, y es muy parecida a Ariadna.
—¿Y quién la está trayendo hasta aquí? —le inquirió Derek.
—Áaron... Ella y Áaron son pareja.
Adrián arqueó una ceja, sin dejar de abrazar a Rose.
—¿Áaron tu hermano?
—Sí —pronunció Kyle con desagrado.
—No es muy diferente a lo que tú querías hacer con Ariadna ¿Lo olvidas? —acotó Derek.
El castaño rodó los ojos y continuó acariciando el cabello de su mujer... ¿Cómo negarlo? Era la verdad.
—¿Y están muy lejos de aquí, Kyle? —le preguntó Ariadna—. ¿Qué más te han mostrado? ¿Cómo es su personalidad?
—Es igual a ustedes, Ari, risueña, ingenua, bonita, solo que no es rubia, es castaña.
—Tengo una hermana —sonrió emocionada.
¡Al final no sería la única mujer de su familia!
***
Observó el cielo con tintes anaranjados, rosados y amarillos, y algo dentro de su pecho comenzó a despertarse, una emoción indescriptible. No sabía cómo, pero estaba segura que estaba cerca.
—¿Esa es su casa?
—Supongo que sí, nunca vine a la casa de Kyle, pero es la única de la zona.
—Deten el auto.
—Pero estamos-
—Sólo detenlo.
Áaron detuvo el auto y Laila se bajó, antes de comenzar a correr por el camino hasta la casa. El rubio observó aquello y respiró profundo, cerrando los ojos por un momento... Ella no volvería con él a su casa.
Los ojos de Laila se cubrieron de lágrimas, mientras se iba acercando más al hogar de sus padres, ignorando que el auto de Áaron venía detrás de ella despacito.
"Laila, no te olvides de tu misión y el motivo por el que has sido creada."
Negó con la cabeza, ignorando la voz de Jaden, que hacía mucho tiempo no escuchaba. No le interesaba en lo más mínimo aquello, sólo quería estar con su familia.
—¡Mamá! ¡Papá! —gritó a pocos metros de la puerta.
Puerta que se abrió, revelando la imagen de dos adultos, y fue una mujer rubia quien la recibió en sus brazos, abrazándola con fuerza, mientras ambas comenzaban a llorar.
—Dios mío, Kyle tenía razón, eres igual a Ari —sollozó Rose, tomándola del rostro para mirarla—. Tan bonita, tan hermosa mi hija.
—M-Mamá —sollozó Laila—. Toda mi vida s-soñé con este momento, yo sabía que mis padres estaban vivos, yo lo sentía —lloró volviéndola a abrazar.
Rose extendió uno de sus brazos hacia Adrián y lo unió al abrazo también.
El auto de Áaron se estacionó a unos metros de la entrada de la casa, y el rubio se bajó, observando como Kyle y sus hermanos salían de casa, ignorándolo, ya que la atención estaba en Laila.
—Bienvenida, Laila —sonrió levemente Kyle, antes de ser abrazado por la castaña, y que él le correspondiera.
—¡Hermana! —exclamó Ariadna abrazándola cuando Kyle la soltó—. Ya no estarás más sola, ahora nosotros estaremos contigo, y por cierto, yo soy Ariadna —sonrió con lágrimas en los ojos.
Kyle observó a Áaron y le hizo una seña con su cabeza para que lo siguiera, por lo que el rubio lo siguió hasta uno de los laterales de la casa, caminando hasta el patio del fondo.
—No debería agradecerte por haberla traído, pero gracias por hacerlo de todos modos.
—Supongo que por primera vez en mi vida, hice lo correcto —pronunció bajo.
—Por como te ves y te sientes, creo que mis suposiciones eran ciertas.
—¿Cuáles? —le inquirió mirándolo, frunciendo el ceño.
—Que ella estaba contigo por obligación, sabes que ahora no te elegirá, que se quedará aquí con nosotros, SU familia.
—Jamás la obligué a estar conmigo —masculló.
—Sabes muy bien a lo que me refiero.
—Espero estés feliz, Kyle —le dijo dándole la espalda—. Tú eres el líder de la humanidad, haz lo que quieras ahora.
—¿Qué quieres decir con eso? ¿Laila te deja y tú por eso abandonas tu puesto?
—Vete a la mierda.
Se dirigió al frente de la casa, y como esperaba, ya no estaban allí, habían entrado. Fue hasta el baúl y dejó la maleta y bolso de Laila en la puerta, antes de subirse al auto y marcharse de allí, activando nuevamente sus habilidades, para que nadie pudiese entrar en su mente o supiera su ubicación.
Ni siquiera Kyle.
—¿Qué crees que hacés? ¿Por qué la dejaste en ese lugar? —le inquirió aquel rubio apareciendo en el asiento del acompañante, junto a él.
—¿Tú no debías de proteger a una pareja que es como tú? No sé que haces en mi auto.
—Sí, y estoy cumpliendo con mis obligaciones ¿Por qué tú no?
—¿Y tú te piensas que mi muj-, que Laila me elegirá a mi después de conocer a su familia? No seas imbécil —pronunció con rabia—. Esto es algo que siempre ella anheló, y ahora que lo tiene, no lo va a perder, y mucho menos por mi.
—Te dije que la nueva humanidad comienza con ella, y tú debes estar ahí.
—Felicidades, tú causaste esto —le dijo girando en una esquina, saliendo hacia la carretera.
—No, esto lo causaste tú por no ser honesto desde un comienzo con ella y decirle la verdad.
Áaron giró la cabeza y lo observó con rabia.
—¡¿Qué carajos sabes tú?! ¡No tienes idea de nada! Yo la conozco desde mucho antes de vernos por primera vez. Nosotros estábamos destinados a estar juntos ¡Y tú te cagaste en todo contándole a su hermano la verdad! ¡Ella no-!
—Mira al frente.
Y cuando Áaron giró la cabeza hacia el frente, fue demasiado tarde, su auto rompió la baranda de la carretera, cayendo colina abajo, después de todo, los campos de Adrián estaban en una zona montañosa.
Kenta flotó sobre el auto, observando como este caía cuesta abajo rodando y abollándose una y otra vez en cada golpe.
Mm ¿Un hombre podía sobrevivir a eso?
...
