La daga del principe perdido.

Fuego.

Lo mas probable es que muera.
Me va ha vender, y seguro que me entregan.
Hace 539 dias que mis padres murieron. Para ser exactos por mi culpa.
Viviamos a las afueras de nuestro reino, Asalia, en una pequeña cabaña, junto a mis padres y mi hermana menor Deisy. Todos nos conocian por ser los herreros del pueblo. Papa, solia viajar por mucho por trabajo. El trabajaba para los reyes de nuestro pequeño reino, la reina Leah  y el rey Maison gre'y. Un dia, en medio de uno de sus viajes, cuando tenia trece años, llego mi gran dia. Mi ascension. Los dioses nos hicieron un regalo. Nos dieron un don a cada uno. Siempre eran los mismos: El control de tierra, agua, sol o aire. Leer las mentes, la inteligencia, teletransporte o hablar con los animales. A mi no me toco ninguno de esos. El dia de mi ascension cai gravemente enferma. Tuve grabes niveles de fiebre, llegue a extremos en los cuales un humano no habria podido sobrevivir, mi madre, sola y preocupada llego a pensar que no iba sobrevivir, despues de eso estuve doce dias en cama. Yo me sentia decepcionada porque pensaba que los dioses no me querian recompesar a mi. Un par de noches despues, recogiendo ballas con Deisy, se nos acercaron un par de nobies, los aldeanos a los cuales los dioses no les otorgaron ningun dios. Todos sabemos quienes son los nobies, estan desgreñados y son conocidos por perder la cordura. Todos los habitantes del reino se alejan de ellos como de la peste, ya que si un nobie te clava una daga en el corazon, tendra el derecho de robarte tu don. Esa noche aquellos hombres nos intentaron matar por puro placer y sed de venganza. Dijeron cosas horribles sobre mi padre, y le hechaban la culpa por todos los problemas economicos del reino, decian que el era el unico aldeano que tenia contacto con los reyes y los principes, Nate gre'y el heredero al trono y su hermano menor Foster. Decian que mi padre era un traidor, que habia decepcionado al pueblo y que nosotras pagariamos las deudas de nuestro padre Marck. Uno de ellos se acerco agresivamente a mi hermana pequeña y en ese momnto senti como todos mis sentidos explotaban, la furia hervia en mi interior, y simplemente explote. Una rafaga de fuego salio de mis manos, y los queme vivos. Ese dia descubri mi don, mi regalo de los dioses, pero no sabia que eso iba a ser lo que cabase la tumba de mi familia.
Los rumores se extendieron por todo el reino y en menos de una semana todos sabian de mi existencia. "El agua compuesta en fuego" me llamaban los ancianos de mi aldea. Siempre apostaban por que mi don seria el del agua por m color de cabello azulado, y ojala hubiera sido asi. Desde que tengo catorce años, todos intentan capturarme. Dones como los mios solo pasan de una a mil millones de personas, asique mi familia y yo viviamos constantemente en peligro. Mi padre dejo su trabajo en palacio para poder protegernos, y eso hizo cada segundo de su vida. Cuando yo tenia diecisiete años, sufrimos una emboscada en la madrugada. Catorce hombres entraron en casa y asesinaron a papa. Deisy y yo nos escondimos como nos indico mama, y ella salio para protegernos. Tardaron tres minutos en asesinarla a ella, escuchamos cada grito y a dia de hoy sigo soñando con ellos. Deisy fue la siguiente, y yo sin poder moverme por el sufrimiento no hice nada para salvarla. Los hombres se empezaron a disparar entre ellos hatsa que solo quedo uno, Jablood. Me secuestró y me llevo con el para poder usarme de la forma en la que el le diera la gana. Ese es el punto en el qu estoy ahora, con casi diecinueve años, encerrada en una torre, a punto de ser vendida a alguien que se va aprovechar de mi de cualquier forma.

eso es lo que nos toca.

El sonido de un par de golpes en la puerta me dejo claro que era mi hora de marchar a mi nuevo destino. Cogi mi pqueña maleta y me dispuse a salir por la puerta.

                                                                                    ºººº

     - Sigue caminando y no hagas ruido.- me dijo Jablood, mientras caminabamos por el bosque de los susurros. Se llama asi porque el bosque esta lleno de secretos, y si entras solo sin conocer la ruta no saldras jamas con vida. Caminando con mi pequeña bolsa con ropa y un poco de almuerzo, pense en si ese dia seria el dia de mi muerte. Pense en si porfin me reencontraria con mis padres y hermana.
     - ¿Porque no lo hiciste antes?- Jablood me miro extrañado, asique prosegui. - Si sabias desde el principio que me querias vender,  ¿Porque no lo hiciste antes? has tenido la oportunidad y nunca lo hiciste ademas...
     - No te atrevas siquiera a pensar que me apiado de ti, preciosa. Simplemente quiero que me recompensen bien por ti ya que...
Deje de prestarle atencion cuando vi un cartel pegado a un gran roble. Era yo.

Se busca. Viva o muerta. Se la juzga de homicidio. Padme Naihan.

Hay. que. joderse. Al lado de mi cartel habia otro, con una cara conocida.

Se busca. Vivo o muerto. Principe perdido. Ha escapado de palacio real. Principe Foster gre'y.

Papa siempre me contaba historias sobre el. Era aventurero y amable, y siempre se preocupo por nuestra familia, ¿que le habra hecho escapar de palacio?
     - Jablood.- dijo una voz de un hombre, desconocida para mi.- Me alegro de verte. Y supongo que tu seras el fuego.- Me dijo el hombre, dirigiendose a mi. Tenia una mirada llena de poder, y senti miedo.
Este hombre no iba ser como Jablood. El me iba a matar, se iba a quedar con mi don. Se acerco acechante hacia mi, mientras se lamia el labio inferior. Jablood le puso una mano en el hombro, para que mantuviera las distancias.
     - Primero el dinero.- le dijo secamente.
El hombre se saco una pequeña bolsa de sus ropajes, y se la tendio a mi dueño. Jablood la acepto, y me empujo contra aquel misterioso hombre.
     - Ya te tengo.- dijo, con un sonrisa picara mientras me agarraba de la cintura.- No te preocupes, preciosa. Todo acabara muy rapido...
Senti como el hombre me colocaba una daga en la espalda. Era mi final...
Justo en ese momento el sonido de las ramas rompiendose, nos distrajo a todos.
     - ¿Que ha sido eso? - pregunto Jablood.
     - No lo se, - dijo el hombre.- Y tampoco pienso quedarme para averiguarlo.
El hombre, me agarro las caderas y me volvio a poner la daga en la espalda.
Cerre los ojos, esperando que me llegase una punzada de dolor... Que nunca llego.
Abri los ojos, y miro a Jablood que tiene la boca abierta de par en par. Me giro hacia el hombre que ha estado apunto de matarme, y me tapo la boca horrorizada.
Le salia sangre a borbotones, de la boca. Mire hacia abajo, y vi que una flecha le sobresalia del pecho.
Un hombre completamente vestido de negro, apuntaba hacia nuestro paradero. Otra flecha fue disparada hacia el paredero de Jablood, pero el la esquivo facilmente.
     - Es el escudo real...- susurro este. - Es el principe perdido.
Otra flecha fue disparada hacia Jablood, estaba vez si le dio, y se desplomo en el suelo. Me giro hacia el hombre, vestido de negro. Se baja la capucha y en ese momento lo veo.
Esa mandibula marcada. Esos labios gruesos. Aquellos ojos azul tan claro como el hielo. Y ese pelo negro azabache, alborotado con pequeños rizos.
El principe Foster, gira su cabeza hacia mi, observandome, y por primera vez en toda mi vida, me pierdo en los ojos de alguien, y despues de años, siento como mi corazon vuelve a latir.