𝙇𝙖 𝙥𝙖𝙧𝙩𝙚 𝙤𝙨𝙘𝙪𝙧𝙖 𝙙𝙚𝙡 𝙖𝙡𝙢𝙖, 𝑼𝒏 𝒂𝒎𝒐𝒓 𝒆𝒏𝒇𝒆𝒓𝒎𝒊𝒛𝒐

16.

¿Coincidencia o Debilidades?

ASHER:

La muerte de Eiberlin es algo que no me espere, esa noche no pude dormir pensando en ella.

Gotas de lluvia caen a mi alrededor resbalando por mi paraguas pero sigo caminando entre las tumbas con mi elegante traje blanco como era la ultima voluntad de ella.

Encontrar a Angeline me sorprendió ya que pensé que todos se habían marchado pero hay estaba ella empapada colocando flores en la reciente tumba.

Le entregue mi paraguas queriendo mantener una distancia prudente pero no pude hacerlo y la abrace.

Quería comenzar una pequeña conversacion con ella pero en ese momento llego Hanna.

Ver como Hanna hablaba mal de Eiberlin aún después de su muerte me hizo enojar pero a Angelines le afecto mas llegando el punto de darle una bofetada.

¿Sonaria muy egoísta si digo que la disfrute?

Pero todo aquel disfrute se desvaneció cuando Hanna comenzó a contarle el pasado de Eiberlin. Los ojos de Angeline mostraron tristeza, desilusión y decepción.

Yo no me sorprendo porque Eiberlin la primera vez que estuvimos juntos hace un año, estaba borracha y me lo contó y al día siguiente no se acordó así que decidí guardar silencio.

Hanna le da una bofetada a Angeline y intervengo ella se aleja caminando evadiendo las tumbas y cuando esta lo suficientemente lejos se gira un poco hacia nosotros.

- Cuidate Angeline porque tienes varios lobos muy cerca.

¿Lobos? ¿Que quiso decir con eso?

Me giro hacia Angeline y veo que esta muy pálida, sus labios morados y sus ojos cerrandose.

- Angeline no..

Cuando esta a punto de desplomarse la tomo en mis brazos cargándola hasta mi auto.

Rápidamente la subo a la parte trasera y puedo sentir su piel muy fría. Maldigo entre dientes porque si no hago algo rápido le dará una hipotermia. Trato de colocarle mi saco pero este también esta empapada.

Miro a los alteradores desesperado pero solo veo tumbas. Estoy apunto de rendirme cuando a lo lejos veo una casa que debe ser de los que cuidan el cementerio.

Cierro la puerta dejando a Angeline tumbada y corro hacia la pequeña casa tocando la puerta. Pasan unos segundos y una anciana sale cargando un pequeño látigo, antes de que pueda reaccionar me golpea con él.

- Viejo te dije que no fueras a la tienda con esta lluvia.

La miro confundida y ella abre mucho los ojos, se inclina pidiendo disculpas apresuradamente.

- Lo siento pensé que era mi marido.

- Perdón por llegar así pero necesito un favor - Señalo el auto a lo lejos - En mi auto esta una chica que duro mucho tiempo bajo la lluvia y necesita una manta para abrigarse. Por favor necesito que me venda una cobija.

- Ohh claro.

Ella entra a buscar algo y sale con una manta, desesperado tomo la cobija y saco dinero de mi bolsillo pero ella niega con la cabeza.

- No es necesario, lamento haberle golpeado - Trato de convencer que tome el dinero pero ella me gira para que camine - Corre ve a cubrir a tu novia.

Y con eso cierra la puerta, corro hasta el auto nuevamente y subo en la parte trasera cerrando tras entrar.