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𖦹꙳࡛࣪⋕ ˚.✦ ⵢ₊˚.
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La historia sigue a Sidney Biss Lawrence, la hija de Johnny Lawrence, quien regresa a West Valley después de 10 años. Sidney es una joven apasionada por el karate y el skate. Su llegada desencadena una serie de eventos que la ll...
Sidney se sentó en el salón de su padre, mirándolo con determinación.
"Padre, necesito saber qué pasó", dijo Sidney. "Por qué me dejaste sola con mi madre."
Johnny suspiró, frotándose la cara.
"Tu madre... me engañó", dijo. "Con otro hombre. Me destrozó, Sidney. Me sentí traicionado."
Sidney se estremeció.
"¿Y por qué te quedaste con Robby?", preguntó.
Johnny se levantó, y la miro..
"Robby era mi hijo,de mi sangre", dijo. "No podía dejarlo atrás. Pero contigo... no pude soportar la idea de que fueras un recordatorio constante de su infidelidad."
Sidney se puso de pie, su rostro enrojecido por la ira.
"¿Un recordatorio?", repitió. "¿Eso es lo que soy para ti? Un recordatorio de su traición?"
Johnny se volvió, intentando calmarla.
"Sidney, no es eso..."
"Pero sí es eso", interrumpió Sidney. "Me dejaste porque no podías soportar la idea de que yo fuera un recordatorio de ella. Me dejaste porque elegiste a Robby sobre mí."
Johnny se sintió abrumado por la culpa.
"Sidney, lo siento..."
"No", dijo Sidney, su voz temblando. "No lo sientes. Si lo sintieras, no me habrías dejado. No me habrías elegido a Robby sobre mí... si me quieres a mi y a robby nos hubieras criado juntos.."
Sidney se acercó a su padre, su mirada llena de dolor.
"Con mi madre viví un infierno", dijo. "Pero contigo... contigo viví un vacío. Un vacío que nunca se ha llenado."
Johnny se sintió abrumado por la culpa, pero también se defendió.
"No puedes entenderlo, Sidney", dijo. "No sabes lo que pasé. Tu madre me destrozó, me mintió, me engañó. Y tú... tú eres igual que ella. Solo piensas en ti misma."
Las palabras de Johnny golpearon a Sidney como un puñetazo en el estómago. Se sintió como si hubiera sido golpeada en su corazón.
"¿Igual que ella?", repitió Sidney, su voz temblando. "¿Cómo puedes decir eso? ¡¿Cómo puedes compararme con ese monstruo?!"
Johnny se dio cuenta de su error, pero ya era demasiado tarde. Las palabras habían salido de su boca y habían herido profundamente a su hija.
Sidney se desmoronó, llorando desconsoladamente. Se dio la vuelta y salió de la casa, dejando a su padre solo con su culpa y su arrepentimiento.
Johnny se quedó en el salón, sintiendo el peso de su error. Se dio cuenta de que había herido a su hija de manera irreparable.
"Sidney, no...", gritó, corriendo hacia la puerta. Pero ya era demasiado tarde. Sidney se había ido.
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