HEYee - X {[Haikyuu] [Ushiten / Bokuroo] [AU] [Gardenverse] [R+18]}

Capítulo 1: Un nuevo comienzo

N/A: esa es la imagen por la que comenzó este fic y porque ando leyendo: Given, je. Ya solo me falta comprar el tomo 9 para leerlo (del 1-5 me los prestaron para leer y ahora los tengo que comprar)
TW: Smut/lemon (bottom Kuroo) 
TW: Este fanfic está medio curiosito, no les voy a mentir. 

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Canción: Avalon - DPR IAN

—Para el siguiente ciclo escolar, quedas expulsado de esta institución.— reprochaba la directora del colegio.

A Tendou, claramente, no le importaba. En su rostro se veía el evidente desinterés. No era la primera vez que llamaban la atención del chico por pelearse; Satori caía en la categoría del llamado chico problema, a causa de las constantes revueltas en las que se encontraba, en defensa él siempre decía "ellos empezaron." A los oídos de cualquier superior era nada más la típica excusa del problemático, ¿quién iba a creer que los mejores estudiantes molestaban al vago de la clase?

No solo estaba condenado a tener que pasar su último grado de preparatoria en alguna mala academia, conocía a su familia y sabía que lo iban a mandar a alguna institución aleatoria; también iba a tener que salirse de aquel club de canto en el que se encontraba. Sus padres le habían amenazado: si se volvía a meter en alguna revuelta o discusión, iba a verse obligado a salirse. Era una forma de reprimenda o castigo (absurdo), ya que nadie confiaba en que el pelirrojo era la víctima.

A ojos de todos, solo era el revoltoso floricultor, que no respetaba, alguien rebelde, y en búsqueda de atención. No era así, solo anhelaba buscar la tranquilidad en su día a día, la cual estaba muy lejos de tener.

[...]

Aquel semestre y ciclo escolar finalizó lleno de caos y muchos problemas. Los maestros y directivos de la institución, no se habían molestado en lo absoluto por reprender o llamar la atención del floricultor más despreciable. Solamente lo dejaban pasar, y que hiciese lo que le venía en gana. Al mismo tiempo el bullying y burlas comenzaron a cesar, no había mucho motivo; lo divertido para aquellos agresores era simplemente ver el modo en el que se metía en problemas y nadie le creía, el modo de hacerle sufrir y causarle dolor. Era gracioso para aquellos espectadores.

Satori en ningún momento comprendió por qué los maestros jamás se habían puesto de su lado al momento de ser la víctima, siempre veían por los demás, ¿era por su cabello? ¿Su apariencia? ¿Su especie? Muchas preguntas y pocas respuestas para Tendou, pero eso era lo de menos. Era libre. Ya no iban a haber burlas, críticas a su apariencia o acciones que le lastimasen.

Y como ese horrendo ciclo había finalizado, daba inicio a una de las mejores épocas del año: vacaciones de verano. Decidido, Tendou iba a trabajar todo su verano con tal de irse lo más pronto de su hogar y seguir aquel sueño firme que seguía desde pequeño, ser idol. Anhelaba debutar en algún grupo, pero ¿cómo? Si su oportunidad de conseguir integrantes para ello había sido despreciado por su apariencia y especie. Ser floricultor y debutar como solista le iba a acarrear problemas, la sociedad los marginaba en su mayoría por el motivo de que estos eran simples minorías.

Habían cantantes, idols, actores y muchos floricultores, en la industria del entretenimiento, pero todos y cada uno de ellos narraban una misma historia; la dificultad de llegar hasta donde habían llegado, si bien, siempre estaba esa constante de rechazo social, ¿por qué el rechazo? No importaba, Tendou tenía un temperamento y carácter lo bastante fuerte que le impedía derrochar ese vago sueño.

Los días pasaban y el chico era dedicado a su trabajo en una pequeña cafetería al centro de la ciudad, en un pequeño rincón poco transitado, lo que abría paso a que al ser el único por las mañanas, se pusiera a practicar su canto, aquellas suaves melodías y canciones que usualmente eran covers. Carecía aún de inspiración para crear una pieza única, se conformaba con aquella dulce voz melodiosa que tenía.