You're the loss of my life

Capítulo uno

(Nerissa's Version)

Al igual que todos los días comunes y corrientes, volvi a despertar en la misma habitación en la cual he estado por un poco más de dos meses desde que ingresé a este hospital.
Aunque no me termine de simpatizar la idea de que mi nuevo cuarto sea el de un hospital, mínimo ya me acostumbré.
Algo que hace que mi estancia sea más placentera, es que tenía permiso de adornar la habitación a mi gusto, así que, las paredes ahora estaban tapizadas con posters de la mismísima Taylor Swift que había ido coleccionando desde que era fan de aquella cantante.

Normalmente solía despertar a horas algo tempranas, aproximadamente a las ocho de la mañana, sin embargo no tenía muchos ánimos de levantarme de la camilla, entonces solamente estiré mi brazo para lograr alcanzar mis audífonos los cuales estaban sobre mi mesita de noche.
Tenía preparada toda una playlist con mis canciones favoritas de Taylor Swift, que también eran las que, ante mi punto de vista, también me identificaban.
Estaba a punto de colocarme mis auriculares hasta que vi que un chico se acercaba a mi puerta.

Tenían que interrumpir en el mejor momento...

- Eh... ¿Nerissa Beck?- Preguntó viendo unos papeles que tenía en mano.

- Soy yo- Confirmé.

- Menos mal, no quería pasar una vergüenza hoy.

Lo último que dijo me hizo reír un poco, fácilmente sería algo que yo también diría.
Dejando de lado su comentario, pregunté por algo que ante mi punto de vista era fundamental .

- ¿Y tú eres...?

- Ah, lamento no presentarme desde antes. Soy Alex, Alex Stevens y voy a ser tu médico por un buen tiempo, así que si tienes algún inconveniente, no hay cambios.

- De momento no tengo inconvenientes.

- Eso es bueno, ¿Becky?

El apodo que me había puesto ocasionó que la leve sonrisa que se había dibujado en mis labios se desvaneciera,¿Cómo iba a confundir un apellido con un nombre?

- Ese es mi apellido, y ni siquiera es Becky, es Beck.

- Ups, una ligera confusión, Becky- Esa vez ya lo había dicho para molestarme.

- Ya tengo inconvenientes- Respondí.

Aquel chico solo rió entre dientes y salió de la habitación.
Al parecer él era simpático, de momento me caía bien, aunque confundiera mi apellido. Ah, y también debo agregar que era bastante atractivo.

Iba a volver a ponerme mis audífonos, pero mejor fui por mis tenis para colocarmelos y salir del cuarto, pues iba a visitar a una de mis amigas que tenía en el hospital.

Como ya mencioné, salí de mi habitación y estuve caminando por los pasillos, la verdad me tarde más de lo esperado en llegar al otro cuarto, pues constantemente me detenía a saludar a enfermeras y doctores que me atendieron semanas atrás.

- Hey- Saludé a mi mejor amiga una vez que llegué a su cuarto.

- ¡Nissy!, ¡Que desaparecida estabas,  desgraciada!- Se levantó de su camilla y fue a abrazarme.

- Tengo más cosas que hacer, Brisa.

- Sí, sí, Nissy. En otros temas,¿Qué doctor te asignaron?, escuché que están poniendo a practicantes.

- Alex Stevens, creo.

Brisa se me quedo  viendo  como  si  yo  fuera la mismísima Taylor Swift y no entendía el porqué.

- ¿Qué?- Pregunté.

- ¡Nissy, el hijo de Elisa es tu doctor! ¡Alex es el mejor de su clase!

- ¿Y...? Para ser doctor debes ser bueno.

- Es bueno y esta muy bueno- Respondió con una sonrisa pícara.

- ¡Brisa! Es muy temprano como para estar escuchando tus amoríos con los doctores.

- Vamos, Nissy, sabes que Stevens esta bueno.

- Es atractivo, pero no me lo daría. Pero tengo más cosas que hacer, así que mejor me voy.

Brisa asintió y yo salí de su habitación para regresar a la mía.

Cuando iba por los pasillos, visualice que el chico que me había atendido hace algunos momentos, estaba fuera de mi habitación.

- Hey, te estaba esperando- Me dijo apenas me vio.

- ¿Para qué?- Pregunté.

- Olvide darte unas pastillas.

- Qué gran doctor, olvidando atender a los pacientes- Dije con sarcasmo.

- Lo sé, por algo soy el mejor de mi clase- Respondió tal y como lo haría un narcisista.

Pero dejando de lado su respuesta tan egocéntrico, las palabras que Brisa me había dicho anteriormente llegaron a mis pensamientos; "Es bueno y esta muy bueno".

- Por cierto, tu cuarto es lindo- Cambió descaradamente de tema.

- ¿Vienes a darme las pastillas o a husmear en mi habitación?

- Pues ahora tengo la oportunidad de conocerte tu cuarto, así que la estoy aprovechando.

-Ya la aprovechaste, ya puedes irte.

Alex obedeció y comenzó a alejarse de mí y de mi habitación.
Cuando lo ví marcharse, algo que llamó mi atención acerca de ese muchacho, fue que, a pesar de que llevaba su uniforme del hospital, también llevaba unos Converse blancos, sinceramente no tenía idea de que iba con el código de vestimenta portarlos, sumando que esos tenis tenían fama de ser bastante incómodos, yo tenía un par de estos en color negro y la verdad no aguantaba más de medio día con ellos, entonces dudaba de que fuera lindo pasar toda una jornada de trabajo de pie con esos tenis puestos.

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Nota de la autora:

¡Hola!
Espero que este primer capitulo sea de su agrado, y también deseo que logren conectar con Alex y Nerissa tanto como yo lo hice.
Voy a estar actualizando esta bella historia cuando tenga tiempo, pues mi horario estudiantil no me permite escribir con tanta regularidad, je,je
¡Esperen el siguiente capítulo!

Atte: Majo ♡