Painfull Cuddles - By Avruk. [Capitulos En Proceso]

Chapter 23 - 24

Enfocar...

Ella tenía que concentrarse...

Un trabajador que gritaba fue dolorosamente partido por la mitad, el aceite se derramó por todas partes. Todavía hay más para devorar y desmontar.

Enfocar...

Ella no podía dejar que sus pensamientos nublaran su mente.

Otro trabajador muerto, con la cabeza aplastada sin esfuerzo como si fuera una lata. J no le prestó atención y rápidamente fue a buscar otro.

Enfocar...

De todos modos, él no era real, lo que pasó allí no importaba. No debería importar.

El desafortunado dron gritó de dolor mientras su rostro se derretía y se lo comía el ácido amarillo. Sus ojos lo miraban con expresión inexpresiva, otro más en su creciente recuento de cadáveres.

Otro día, otra masacre.

Caminó lentamente hacia la salida, sin muchas ganas de quedarse más tiempo en ese almacén destartalado. Los cadáveres mutilados de los drones estaban esparcidos por todo el salón principal, todos destrozados en varios pedazos. Todos ellos habían perdido su preciado aceite vivificante. J tuvo una comida abundante hoy que solo mejoró ligeramente su estado de ánimo. La forma en que los mató, la forma brutal y desordenada que recordaba a V, no fue la más efectiva. Por lo general, usaría precisión quirúrgica para matarlos con el menor esfuerzo y energía gastados posibles, pero usar la estrategia de V ayudó a J a calmarse y dejar salir sus emociones innatas.

Un fuerte ruido llenó sus receptores auditivos, era desagradable por decir lo menos. Se detuvo en seco con un suspiro.

Parecía que se había olvidado de un dron, otra vez.

Rastrearlo no fue difícil, encontró el dron que lo cubría en una de las oficinas después de buscarlo por un momento literal.

El dron no era como los demás, parecía... ¿más pequeño? Esto era extraño, hacía años que no veía un dron más pequeño. Estaba de pie, con las piernas temblorosas y los ojos hundidos y blancos, en un rincón. Se preguntó cómo había acabado allí un dron tan joven.

Basta.

Enfocar.

Tienes un trabajo que hacer, no dejes que tus pensamientos obstaculicen tu máxima eficiencia.

Con un movimiento rápido, su espada atravesó el pecho del dron y el aceite se filtró por la herida. El pequeño dron la miró con los ojos hundidos, la boca abierta y congelada mientras el par de ojos blancos parpadeaban lentamente hasta perder la vida. Después de un momento de intensa mirada entre J y el dron sin nombre, se quedó inerte y ella sacó su espada de su cuerpo.

Sus ojos entrecerrados miraban fijamente el cuerpo que tenía debajo. Sentía como si algo la estuviera apuñalando, cortándola.

J no le prestó atención. No debería sentirse así cuando hace su trabajo.

Pero esa mirada que le dirigió le provocó un escalofrío en la espalda. Ningún dron había hecho algo así antes y fue... perturbador, por decir lo menos. Fue culpa suya. No debería haber sido tan lenta al matarlo.

Se dispuso a abandonar el edificio, esta vez con seguridad y sin intenciones de volver. Pero una minúscula parte de ella tenía algunas dudas...

Sus alas la mantenían planeando sobre el paisaje de la ciudad. La mente de J no dejaba de traer a la mente pensamientos aleatorios, en su mayoría molestos, pero ella lograba mantenerlos alejados. El viento helado que golpeaba su rostro ayudaba con eso.