Capítulo 3 🌺✨

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Jimin

Así que aquí estoy de nuevo lamentándome de en que momento me metí en este problema…

Investigué junto a mis padres a Min Yoongi y lo que encontré es que era un empresario hotelero, un hombre muy reservado y enigmático y al parecer recientemente soltero, se iba a casar pero por alguna razón en este mes su compromiso se disolvió, eso me alegró un poco, pues así sería más fácil, no habría una o un posible omega celoso detrás de él, ya que así sería más difícil que me firmara un documento cediéndome los derechos de mi cachorro, porque es mío, es mi bebé no podría dejárselo, ni por ser él el padre.

. ¿Señor Kim Jimin? – oigo que la mujer llama y me levanto rápidamente, lo que provoca que me maree un poco pero no se si es por el embarazo o por los nervios, la mujer me ayuda es una omega adulta y me sonríe.

. ¿Estás bien?

. Si, muchas gracias.

. Pase por favor.

. Gracias. – al entrar veo a un hombre firmando unos papeles. Intento decir buenos días pero él me corta de inmediato.

. Siéntate y dime porque debería de  contratarte como mi asistente personal.

. Pues soy eficaz, tengo experiencia, hablo varios idiomas…

. ¿Cuales? – pregunta sin levantar a un su rostro.

. Inglés, japonés, portugués, español, francés, italiano y algo de alemán, aún estoy aprendiendo.

. Wow… un prodigio.

. Mis padres pagaron mucho por mí educación.

. Bien.

. ¿Sabes hacer café?

. Si señor.

. Bien hazme uno por favor, la cafetera esta allá – señala con su dedo un rincón pero sigue sin levantar el rostro y yo me empiezo a molestar.

. De acuerdo. – le preparo el café como le gusta a mi papá Nam.

Él es el que ha estado dándome su aroma para sentirme bien estas semanas pero sabía que tenía que hacer esto pues su aroma no sería suficiente los siguientes meses. Dejo el café en el escritorio y el señor Min lo toma y entonces es cuando siento su aroma, dulce aroma a chocolate.

Mi cuerpo se calienta y mi omega dentro de mí brinca de alegría al sentir a mi bebé moverse aunque solo lo sienta él, yo aun no puedo.

Pero también sin verlo venir empiezo a soltar mi aroma y al estar el suyo en el ambiente nos empezamos a abrumar, una perfecta mezcla entre fresas con chocolate se empieza a sentir en el aire de su oficina y es entonces que él se levanta y por fin veo su rostro, es el hombre de la clínica, con el que choque esa mañana.

. ¿Que haces? – me toma del cuello y ese movimiento es algo que no esperaba. - ¿Por qué carajos intentas marcarme con tu aroma, omega?

. No señor lo siento, yo… - su mano se apretó más en mi cuello.

. Si te quedas en este lugar es por tu eficiencia y tus aptitudes, no por que me agrade lo que acabas de hacer, jamás vuelvas a soltar tu maldito aroma nauseabundo en mi oficina.

. S… sí señor, lo siento… - mis ojos picaban a punto de soltar lágrimas por la rudeza de sus palabras.

Malditas hormonas.

. Estas contratado pero no vuelvas a hacer esa mierda cerca de mi.

. Sí señor se lo prometo.

. Ve a recursos humanos y diles que te contraté. Te quiero mañana aquí desde las ocho en punto, no llegues tarde.

Un Hermoso Error 🐺 YM🐺Donde viven las historias. Descúbrelo ahora