-Supongo, no lo sé- un suspiro salió de mis labios
-Eres muy terca- golpeó mi cabeza
-Basta Marck- Dije exaltada
-Basta tu... Hazme caso, cómprale esto a izana- Me dijo con una sonrisa
-Eso lo usaré yo, no el... Como le voy a comprar una blusa - Contesté molesta
-Pues claro, lo que le vas a regalar va a ser la dicha de verte con semejante prenda- Me sonrió y me dio la blusa
Era una blusa de escote negra, la cual usarías debajo de unirme de Tenjiku, algo así al estilo que izana utiliza usar
-Si te la pones abajo del uniforme serás igual que izana, no crees?
-Nose Marck
-Te la comprare yo - Dijo y fue hacia la caja
-no es necesario que lo hagas, no me la pondré- Renege
-No me interesa, algún día la usarás y me agradecerás por eso- El pago y me la dio -Si no la quieres usar ahora no lo hagas, habrá un tiempo para hacerlo
No me quedo más remedio que aceptarla, Marck era uno de mis amigos más cercanos y claro que sabía sobre el interés que tenía hacia izana
-Le diste la carta?- Pregunto
-No... No pude
-No inventes, escribiste demasiado en esa carta
-Ya lo sé
-Que paso? Y las cartas que le dabas anteriormente, no te costaba dárselas y ahora esta si?-Me pregunto
-Marck... Era una carta donde escribí mis sentimientos hacia el, Tenía miedo que se burlara en mi cara -Dije agachando la mirada
Cuando empecé mi interés hacia izana, Marck me ayudaba a darle cartas anónimas a izana, deseándole los buenos días de forma cariñosa o decirle cosas bonitas, junto a un chocolate amargó, los favoritos de Izana, así era todos los días hasta la fecha en la que me declare, un día antes tuve que darle una carta a izana donde expresaba lo que sentía por el, para después en la misma citarlo al lugar donde me haria presente y viera que yo era la que le daba cartas anónimas
Sin embargo, el miedo de la burla o rechazo me invadió y no le di a Marck la carta que era, le dio una donde solo decía un lugar donde el tendría que estar al siguiente día, preferí decirle mis sentimientos en persona, de igual forma no salió bien
...
Dos días despuésNarradora
-Wow!!- Exclamaron algunos
-Es un broma?
-Esta mansión es perfecta!!!
Estabas con Tenjiku en su nueva mansión, ahora ese lugar sería para sus juntas o pasar el rato, para hacer negocios o cosas relacionado a la pandilla, les dejaste muy en claro que tendría que ser lo más discretos al venir hacia acá, izana solo observaba con atención cada espacio del lugar
-Seria una lástima que algún día encontrarán este lugar, nos quedariamos sin mansión-Dijo kakucho
-No te preocupes, Tego otros dos lugares que son accesibles para Tenjiku, si hay alguna amenaza o algo tengo todo bajo control para abandonar este lugar y adaptarnos a otro - dijiste cruzandote de brazos
Izana solo sonrio, no creía lo increíble que eras
Todos estaban muy contentos por lo que habías logrado hacer, ellos tenían mucha fe en ti, le indicaste a izana que habria una especie de, despacho el cual sería de Izana por ser el líder, vendría siendo su oficina en pequeños términos, le dijiste que lo llevarías a que conociera el espacio, el acepto
-Tiene todo lo necesario para que estés a gusto
-Eres muy astuta
-Lo se -sonreiste
-Hay una caja fuerte de ese lado, la puedes usar si gustas, igual hay un cuarto subterráneo donde tendremos el dinero de Tenjiku - Le explicaste
-Sabes ... Para que usaré la caja- Sonrió de lado
-No...?
-La usare para guardar tus cartitas de amor- Dijo en una carcajada
-Cartitas...??- Te sonrojaste
-Crees que no sabía que las cartas anónimas eran tuyas??- se acercó a mí y me tomo del mentón
-Izana...- Tu sonrojo era muy notorio
-Espero que dejes más cartas todos los días en mi oficina, así como lo hacías antes, y con gusto las guardaré en la caja fuerte - Dijo esto y se acercó a mis labios
Tu estabas estática al tacto de este, sentías que sus aires chocaban las las respiraciones nerviosas se hacían presentes, sus ojos ... Dios esos ojos te hacían enloquecer querías que te vieran para siempre, Querías que te vieran como pertenencia de izana
El solo observaba tus labios con deseó y de un momento a otro, realizó un roze pequeño, con tus labios eso te erizo la piel y el soltó una pequeña risa por tu reacción, pues el sabía que te gustaba, sin más... Te beso
Fue un beso corto, pero delicado, algo que no pensarás que pasara y mucho menos en ese momento, pero te importo? Claro que no
-Bien echo nena - Sonrió -Me gusta la actitud responsabilidad que tienes
-Izana...
-Que paso preciosa- Dijo acariciando tu mejilla
Tu eras un tomate literalmente, el solo te recalcaba lo linda que te mirabas sonrojada
-Ire a ver el resto que queda del lugar - Dijo y camino hacia la puerta -Nos vemos después -Te regalo una sonrisa y se marchó
Tu te sentaste en la silla, te tapaste con tus manos, no podias creer lo que pasó, el te beso, aún no conpredias el porqué de su actitud después de rechazarte, aunque no te importaba, te gustaba, pero eso no era el caso estabas muerta de vergüenza al saber que el sabía sobre tus cartas anónimas, según tu el no sabias que eras tú