¿Cuán lejos te atreves a llegar para ganarlo todo?
Max Verstappen y Sergio Pérez comparten casi todo: el equipo de fútbol universitario, un apartamento, y la misma naturaleza extremadamente competitiva. Gracias a ese espíritu de no rendirse jamás, están a punto de compartir más de lo que esperaban...
El juego: el Gay Chicken, la única regla: acercarse a los labios del otro todo lo posible sin retroceder. Aquel que se retire primero es el perdedor. El problema: a ninguno de los dos les gusta perder. Pero el juego se convierte en una simple excusa para poder tocarse y besarse de una manera prohibida. Straight guys.
Y después de posar para un sitio web gay para ganar un dinero extra, las cosas realmente se ponen calientes. De repente, Sergio habla sobre algún tipo de compromiso, cuestión que Max trata de evitar, porque no está seguro de estar dispuesto a aceptar todo lo que su mejor amigo le ofrece. O la verdad sobre lo que realmente es.