diecinueve: horas, no minutos

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Dejé que Hyunjin y Minho siguieran de amigos en la piscina, en cuanto a mí, fui directo al bar del hotel y pedí el trago más fuerte que tuvieran

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Dejé que Hyunjin y Minho siguieran de amigos en la piscina, en cuanto a mí, fui directo al bar del hotel y pedí el trago más fuerte que tuvieran. Escoció mi garganta como si me estuvieran fusilando en ese preciso momento, pero no era nada comparado con la vergüenza que sentía.

Se suponía que era mi luna de miel con Minho, no entendía por qué Hyunjin tuvo que venir a arruinarlo todo. Era mi amigo, gracioso y un chico estupendo, pero no era el momento más adecuado para venir a "animar las noches", de eso me podía encargar yo sin la ayuda de nadie.

De pronto, mientras bebía, sentí una mano delicada en mi hombro. Supe de inmediato que no era Minho, él por lo general sólo iba y me gritaba, o me golpeaba en el hombro o cualquier tipo de cosa infantil que por más años que pasáramos juntos, nunca dejaría de hacer como si fuéramos los mismos pequeños de ocho años.

Giré mi cabeza lentamente y me encontré con una chica rubia extranjera, más o menos de la misma estatura que Minho, pero con unos ojos azules muy profundos y bonitos. Sin embargo, era muy femenina y seductora, no tenía la gracia y simpatía que desbordaba mi esposo.

— ¿Qué hace un chico como tú bebiendo a estas horas? ¿Quieres que te acompañe? — debía tener más de veinte años, se le notaba en la mirada y en la voz. Además, parecía dispuesta a todo por que le invitara una copa.

No me apetecía hablar con ella, pero tampoco estar solo bebiendo como un condenado horas después de bajarme de un avión, así que no reclamé cuando se sentó en la silla que estaba a mi lado.

— ¿Cómo te llamas? — me preguntó. Me miraba de arriba abajo, analizando la ropa cara que la madre de Minho me había regalado para el viaje. Seguro pensaba que era su día de suerte.

— Peter. — mentí. — Peter Lee.

Lee era ahora el antiguo apellido de Minho antes de estar casados, no creía que se enojara si tomaba prestado su apellido para burlarme de una cualquiera por unos minutos. Estaba seguro que si fuera por Minho, me hubiese regalado encantado toda su identidad, le fascinaban este tipo de bromas.

— Yo soy Hanni Pham. — traté de disimular mi asombro lo mejor que pude, a veces para esas cosas era bastante bueno, para ocultar mis sentimientos.

Me dijo su nombre sin habérselo preguntado, y de saber que se llamaba Hanni, tampoco lo hubiera hecho.

— ¿No eres de aquí, Peter?

— No, soy de Malasia. — cada vez se acercaba más hacia mí.

— Yo soy de Australia, de Melbourne. — comencé a odiarla tan rápido como hablaba. Me contaba cosas que no preguntaba y eso era desagradable.

Entonces, cerca de la entrada al bar, divisé la melena castaña de Minho. Ya no estaba con Hyunjin y parecía algo perdido, seguramente no sabiendo a dónde ir o qué hacer.

Deseé que dejara de lucir como un niño extraviado para que me fuera a rescatar de esa bruja que tenía a mi lado, que se las arreglaba para seguir hablando de sí mismo sabiendo que no lo estaba escuchando.

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⏰ Última actualización: 3 days ago ⏰

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