SCHOOL OF LOVE

capitulo ocho

Narrador:

Sheila, como siempre, ajustó el espejo retrovisor y encendió la radio, pero notó que Addison parecía pensativa.

—¿Entonces me vas a contar? —preguntó Sheila mientras Addison empezaba a manejar y salía del estacionamiento.
—Esta bien voy a contarte —respondió Addison, acomodándose en el asiento.
—¡Cuenta! Ya sabes que adoro los chismes —bromeó Sheila.

Addison tomó aire antes de empezar.

—Estaba saliendo del salón de ciencias cuando choqué accidentalmente con alguien. Levanté la vista y, para mi sorpresa, era Alex.
—¿Alex? —repitió Sheila, arqueando las cejas con interés.

Addison asintió.

—Sí, él me preguntó si estaba bien y, aunque fue un momento incómodo, ambos nos disculpamos. Luego, él me preguntó a dónde iba, y le dije que venía a encontrarte aquí, en el estacionamiento. Para mi sorpresa, él también iba para allá porque tenía que encontrarse con Mark.

Sheila soltó una risa corta.

—¿Y qué pasó después?

—Bueno... él me pidió si podía acompañarme, y aunque me sentí un poco nerviosa, acepté. Caminamos juntos y, para romper el silencio, empezamos a hablar.

Addison recordó el momento con claridad mientras narraba.

—Él me preguntó qué opinaba de la escuela, y yo le dije que me parecía bien, que aún me estaba acostumbrando. Después de eso, seguimos charlando de cosas triviales hasta que recibió un mensaje en su teléfono.

—¿Y? ¿Qué decía? —preguntó Sheila con curiosidad.

Addison suspiró.

—Era un mensaje de su novia, Catherine. Me lo dijo sin problema, pero no sé por qué... me incomodó un poco.

Sheila soltó una carcajada.

—¡Estabas celosa! —exclamó, burlándose de su amiga.

—¡No es cierto! —se defendió Addison, sonrojándose ligeramente.

—Claro, claro... como digas —respondió Sheila, con una sonrisa divertida.

Addison resopló, pero no quiso discutir más.

—En fin, cuando salimos al estacionamiento, vimos a Mark discutiendo con Joshua, y tú estabas justo en medio. Y bueno... ese fue mi "encuentro" con Alex.

Addison estacionó el auto frente a la casa de Sheila se giró hacia Addison con una sonrisa pícara.

—Parece que tuviste una buena plática con Alex, aunque todavía creo que te dolió un poquito lo de su novia.

Addison la fulminó con la mirada.

—¡Te dije que no fue así!

—Está bien, lo que tú digas —dijo Sheila mientras bajaba del auto, todavía riendo. Se despidió con un gesto rápido y entró a su casa, dejando a Addison con sus pensamientos.

Narración de Sheila:
Entré a casa y saludé a mi mamá, quien estaba en la cocina.

—¿Cómo te fue hoy? —preguntó mientras revisaba una olla.
—Bien —respondí, intentando sonar casual.
—La comida estará lista pronto.

Asentí y subí las escaleras hacia mi cuarto. Cerré la puerta detrás de mí, me dejé caer en la cama y me puse a mirar el techo. Aunque no quería admitirlo, no podía dejar de pensar en la forma en la que Mark me defendió de Joshua. Había algo en su actitud que me desconcertaba, una mezcla entre molesto y protector que no lograba descifrar.

Sacudí la cabeza rápidamente, intentando deshacerme de esos pensamientos.

—No, Sheila. No caigas en eso. Mark sigue siendo un odioso, aunque... bueno, tal vez no tanto —murmuré para mí misma, sintiendo el calor subirme a las mejillas.

Hasta aquí el capítulo ocho espero les guste y perdón por la inactividad.