GOLDEN YEAR

CHAPTER ONE.

- Virginia y Olivia Miller podemos hablar un momento en el pasillo

La señora salió del salón esperando a que fueramos, todos nos miraban el salón en silencio, solté un suspiro y me levanté de mi asiento, empecé a caminar sin tomarle importancia a las miradas de los demás, pero tuve que agarrar a mi hermana del brazo ya que le incomodaron las miradas.

- Virginia, Olivia -- dijo la señora frente a nosotras cerrando la puerta del salón.

- es Ginny -- corrigió a la señora.

- Su padrastro tuvo un accidente, su madre viene en camino con su hermano - dijo la señora ignorando a mi hermana.

Mi ceño se frunció al escuchar a la señora, Ginny y yo compartimos una mirada confundidas, la señora parecía tener que decir algo más, aunque para ser sincera ya sabia lo que diría.

- Lo siento niñas, el falleció -dijo la señora abrazando a Ginny quien era la más cerca de ella.

Sin duda alguna, teníamos una maldición con todas las letras..

Días después fue el funeral de Kenny, sin duda está era la parte que más odiaba, tener que asistir a funerales y recibir las palabras de aliento de todos, frente mio estaba Kenny muerto en su ataúd, parecía azul, me dió un escalofrío al verlo, me aleje de ahí y me dirigi cerca de mi mamá, mientras mis hermanos estaban lejos y mi madre pareciendo triste, yo escuché a unas señoras hablar mal de mi madre haciendo que me enojara pero no dije nada al saber que a mi mamá estaría más que feliz de estar en boca de esas víboras,
despues de unas horas todos se fueron a sus casas, al igual que nosotros, fuimos a casa a empacar.

Las cosas se arruinan y salimos corriendo a una nueva ciudad... Siempre lo mismo.

......

- Es increíble -dije con una sonrisa entusiasmada.

Ahora estábamos frente a nuestra nueva casa, era hermosa, incluso mejor que la anterior, sin duda está es mi casa favorita hasta ahora.

- nada que ver con la casa de Houston o el departamento de Nueva Orleans-dijo mi mamá dándole un empujón con la cadera a mi hermana ya que estaba muy seria.

- es para nosotros, para nosotros 4? -pregunto mi hermano menor con una sonrisa.

- mhm-contesto mi mamá.

- me pido el cuarto más grande -dijo Austin corriendo hacia adentro.

- Qué?, claro que no ese es mío, tengo derecho de antigüedad Chori --conteste corriendo tras de el hacia adentro gritando lo último.

Una vez adentro subí las escaleras tras mi hermano menor explorando los cuartos por separado, finalmente entre al último cuarto, sin duda este tenía que ser mío, era un tamaño aceptable para mí habían unas ventanas que daban hacia la casa de al lado, pero al aver distancia entre las casas se miraban mas cosas, como la casa de enfrente, tenía un baño grande, después de planificar en dónde pondría cada cosa, baje las escaleras y fui a la cocina por una botella de agua antes de empezar a desempacar.

- Mamá Austin me ganó el cuarto más grande pero yo le gane el mejor-dije con una sonrisa mientras iba hacia la cocina.-crees que sea ilegal si espió a los vecinos por las ventanas de mi cuarto?-pregunto ya estando en la cocina.

Al mirar a mi mamá guarde silencio pues para mi pésima suerte no estaba sola, había una señora de pelo corto color blanco, creo que es la que vive del otro lado de la calle, estaba hablando con mi mamá, me obligue a sonreír deseando que no hubiera escuchado lo último que había dicho, pero vamos, estaba tan cerca, incluso una persona que es sorda me escucharía por la cercanía y por qué lo estaba gritando .