Fuí hecha para amarte

3 de febrero del 2028

Hace aproximadamente una hora los guardias nos confirmaron la muerte de Nashira, informando que no la esperemos en la cena. Valla forma de iniciar un diario.

Nashira era una de las mayores aquí, muy querida por todas, siempre se preocupaba y velaba por todas nosotras; todavía siguen llorando por su muerte, es molesto escucharlas ¿Por qué las personas cuando lloran hacen ruidos tan molestos? Creo que así muestran su dolor y sufrimiento.

Nashira siempre creyó que algún día podría repararme, se esforzó al máximo para que pudiera sentir algo, lástima que su esfuerzo fue en vano. Todas las que están en este lugar sienten pena por mí; he vivido aquí desde que tengo memoria, el jefe de esta organización me contó que mis padres pagaron una deuda conmigo, debió ser muy alta o tal vez no querían tenerme, sea cual sea el caso aquí estoy. Mis padres les ahorraron trabajo a la organización, a diferencia de las que están acá nunca tuve documentos que mostrarán que existo así que no tuvieron nada que borrar, otra razón por la que sienten pena es por mi "condición" o así le dicen a lo que está mal en mí; desde mi nacimiento notaron que estaba rota, nunca lloro, nunca río, nunca me enojo, nunca tengo miedo, nunca siento algo. Me apodan la insensible cuando se enojan conmigo por no mostrar empatía, después de mí sigue Shino, una chica un año mayor que yo, "rubia y de ojos azules" que siempre sonríe, ocupando el segundo puesto en esta absurda competición; ella lloró por la muerte de Nashira dos minutos, después volvió con su molesta mascara de sonrisas, no es que la odie, pero no estoy a favor de que oculte sus emociones de una forma tan patética, pareciera que soy la única que percata sus sonrisas falsas, aún que ahora mismo es la que mejor me agrada, no hizo esos típicos ruidos que la gente hace cuando llora.

Nashira fue secuestrada mientras caminaba sola en la calle, como siempre, aprovecharon para atacarla por ser indefensa, por ser una mujer. No es que sea discriminadora, todas las que estamos acá son mujeres, nunca ha habido un hombre. Nashira era la que más estaba en desacuerdo con que borrarán toda nuestras vidas, bueno, todas sus vidas; a ninguna de nosotras nos buscan, borran los registros y amenazan a las personas que las conocieron o las sacan del país a la fuerza. Le hervía la sangre ver cómo desapareceremos una a una y nadie sabrá que alguna vez existimos, una semana antes de morir Nashira propuso que robaramos papel, cartón, tela, plumas, todo lo que quisiéramos para hacer un diario, para que tengamos al menos un registro de nuestras vidas, sabíamos que si los guardias se enteraban de su existencia los destrozarían y aumentarían los entrenamientos y deberes de cada una ¿Valía la pena tanto riesgo por un mísero cuaderno que contenían las desgracias de cada una de las presentes? Las chicas no estaban seguras de esa idea.

Estamos aquí para ser ratas de laboratorio; experimentaron conmigo a los 3 años, tuve la suerte de salir viva y el experimento salió bien, ahora puedo controlar cada gota de mi sangre a mi voluntad... Pero la codicia del hombre es interminable, antes de mí hubieron otras que murieron por experimentos fallidos y después de mí seguramente habrán más. Eligen a una de nosotras al azar, aún que entre más años tengas más probable es que te elijan, cada vez que una de nosotras sale por esa puerta no vuelve a aparecer, hoy era el turno de Nashira.

Antes de irse abrazó a cada una, a mi me dejó al final, me miró por unos instantes con su mirada triste, sabía que no nos volveríamos a ver, sabía que está era nuestra despedida, si bien nunca sentí que tuviéramos una amistad para ella si, me abrazó, intenté sentir su calor ya que parecía ser un momento especial, quería sentir tristeza por su ida, pero como otras veces, no sentí nada; cortó el abrazo, pero sin separarse me susurró al oído "aún creo en ti". Muchas lloraron por su muerte, en cambio yo volví a mi cama y empecé a leer los libros matutinos que nos entregan, no tardaron en observarme con ira, pero una más una menos ¿Qué más da? Al fin de cuentas todas vamos a morir, es una pérdida de tiempo llorar por algo inevitable y aún que lo intentase no serviría de nada. En honor a ella todas decidieron cumplir su propuesta, me pidieron a mí y a Shino robar todas las cosas necesarias, acepte con mi adorable empatía, lo cual no evitó que mostrarán un gesto de disgusto, seguramente pensaban "la que más creyó en ella acaba de morir y actúa como si no importara" lo siento, no tengo la dicha de sentir, en fin, tuve una excusa para alejarme de sus lamentos. Shino y yo robamos todo lo que pidieron y cada una hizo su propio diario, no le puse detalle como otras, simplemente hice mi trabajo bien, el diario es funcional, con tapa dura color vino tinto, las hojas están bien cocidas, el marco está bien, la cantidad de hojas es adecuada y lo cierra una tela elástica que envuelve a diario; sin duda funcional y elegante, alguna decoración lo dañaría, también hice mi pluma para escribir. Ahora mismo todas estamos reunidas en silencio escribiendo, tal vez sea nuestra nueva tradición.

Por lógica la primera anotación de todas va dedicada a la que propuso la idea y que ahora se encuentra en un lugar mejor o eso es lo que dicen aquellos que buscan el consuelo tras la muerte, La única que tenía esperanza en mí murió, ahora nadie va a molestarme todos los días intentando que sienta algo que nunca sentiré, prefiero que sientan lástima y me dejen en paz... Un corazón vacío da más lástima que uno que está sometido a la tristeza, no recuerdo quién dijo la frase, pero seguro también debió sentir lástima por mí.

Creo que esto será suficiente para que estén satisfechas, escribí 1044 palabras. Nashira, que tengas un buen descanso, eras muy molesta, pero fuiste una buena líder, ojalá no hubieras desperdiciado tu esperanza en una causa perdida como yo.