Viva Las Vegas | L.S

Capitulo IX

Louis estaba dando vueltas en su cama, buscando la comodidad y tranquilidad que su ansiosa mente tanto deseaba, no había podido dormir correctamente, el reloj que estaba ubicado en la mesita cercana a su cama marcaba las tres de la mañana, vaya hora para estar despierto.

Por supuesto que el castaño no era ajeno a esas conspiraciones sobre lo que estar despierto a las tres de la mañana significaba, la hora maldita, no le daba mucha importancia, pero tampoco descartaba la posibilidad de que esas teorías fueran ciertas, y es que justamente en todas las películas de terror marcaban aquella hora en la que aparentemente los demonios les parecía buena idea arruinar las noches de los simples mortales con vidas monótonas, es decir, los humanos.

Suspiró, estaba cansado de buscar cualquier posición en su cama sin tener éxito al intentar dormir, lo peor del asunto es que se sentía agotado, pero simplemente su cerebro no le daba tregua, sino todo lo contrario, peleaba con una lucha de pensamientos y escenarios que lo mantenían alerta.

Sin más remedio, prendió su celular, tal vez podría ver algún vídeo o escuchar música, algo que lo distraiga para que su mente necia decidiera descansar.

Para su sorpresa, un mensaje le llegó, al principio se sobresaltó, ya que no se esperaba el sonido de la notificación, sin embargo, al ver quién era, relajó notablemente sus músculos.

Zayn le había mandado un mensaje.

~¡Hola, hermano! ¿Cómo estás?

-¿Qué haces escribiendo a esta hora? Son las tres de la mañana.

~¿Y tú qué haces contestando a esta hora?

-Vete a la mierda.

~Gracias por tan buenos deseos, Tommo, siempre es bueno saber que tienes el apoyo de tu mejor amigo.

-Como sea, ¿Qué quieres?

~¡Tenemos que ponernos al día, Louis!

¿Ponerse al día? No había pasado mucho en su vida últimamente, además del constante enredo que mantenía con Harry, algo que era bastante confuso aún.

Sin previo aviso, su celular empezó a vibrar, anunciando una llamada de su mejor amigo, sin dudarlo, contestó de inmediato, tal vez charlar un poco lo ayudaría con la maldita falta de sueño.

—¡Cuéntame todo lo de Harry! —Zayn no espero muchos minutos después de que su llamada fue contestada.

—¿Cómo siquiera sabes que algo pasó con Harry? —Louis no le había contado a su amigo, habían pasado meses sin hablar, pero tampoco le reclamaba, el morocho estaba un poco ocupado atendiendo la vida como tatuador profesional en Las Vegas.

—Tengo contactos, Tommo, tengo ojos en todos lados, solo que tú no lo sabes. —Bromeó haciendo reír al ojiazul del otro lado de la línea.

—Bien, te contaré, pero luego será tu turno. —Sin más, Louis inició su extenso relato.

Empezó desde el día en que Daniel le pidió matrimonio, hasta los últimos días, incluyendo aquel día en que entró a la casa y Harry estaba teniendo un ataque de ansiedad.

—Afortunadamente, llegué a tiempo y atendí el ataque de ansiedad de Harry, logró controlarse luego de un tiempo, fue uno de los fuertes. —Su voz sonó agridulce con la simple acción de contar y recordar aquello, aún no asimilaba el estado en que descubrió al rizado—. No sé en qué momento exactamente, pero nos besamos, incluso volvió a llamarme 'BooBear'.