TEMPESTAD⸻ Glenn Rhee, Rick Grimes.

Salvada

Las clases esa mañana había iniciado de lo más normal, me había encontrado con mi mejor amiga Maggie en la entrada, las dos tomamos asientos juntas mientras el timbre iniciaba con la hora del maestro Brown. Los proyectos que estaba dejando para el siguiente trimestre parecían un tormento, mi cara seguro expresaba todo mi horror como Maggie, que casi golpea su frente contra su carpeta en un intento de no estresarse.

De pronto mientras nos daban unos apuntes la puerta comenzó hacer golpeada con mucha fuerza, el maestro Brown pidio un segundo para abrir y lo siguiente paso desato el caos, cuando una persona lo mordio en la cara haciendo gritar a la mayoria. Y el viejo maestro no fue el unico afectado, muchos comenzaron a ser mordidos por otros. Para mi suerte Maggie reacciono rápido tomando mi mano y corriendo hacia la salida sin nuestras cosas.

Al salir los pasillos eran un desastre, alumnos como maestros estaban siendo deborados vivos, y a nosotras no nos quedo de otra que esquivar como si fueramos flash hasta que pudimos salir y llegar al estacionamiento donde Maggie arranco su auto hacia mi departamento. Las calles estaban echas un caos mientras pasabamos, había gente llorando, gritando y corriendo lejos de esas cosas que antes eran humanos.

Al llegar a mi edificio Maggie me acompaño adentro, por suerte me quedaba en el segundo piso, y adentro todavia no pasaba nada malo como afuera. Ni bien abri la puerta la niñera que cuidaba a mi bebé me saludó, tenia sus audifonos puestos, era agena a lo que pasaba y cuando le explicamos solo quiso irse creyendo que estabamos mal de la cabeza. No la detuve, solo aliste las cosas de mi bebé, una maleta mia y agarrando unas escobas con Maggie volvimos a salir solo para ver a mi ex niñera siendo deborada por el de la recepción.

—pobrecita. 

—nos vio de locas. —Maggie siguió manejando mientras yo miraba a mi bebé en mis brazos sentada en la parte de los pasajeros— Pudo salvarse... sinos hubiera hecho caso.

—cierto, eso le paso por pendeja.

Las dos nos quedamos en silenció por un rato, incluso Maggie se paso la luz roja sin importarle.

—¿crees que tu papá nos deje a mi y a Luke quedarnos?

—eres mi mejor amiga, te conocen desde nuestro primer año, también conocen a Luke Estuvimos ahí cuando nació. —recalcó Maggie con una leve sonrisa que ocultaban sus nervios— Tuviste las contracciones en mi casa ¿recuerdas?

—cierto... di a luz el mismo día que tu vaca. ¿Como llamaron al becerro? ¿Mayra o Luke?

Maggie solto una risita.— ¿no vas a comunicarte con Billy? Digo el esta en los angeles.

—me dio la custodia completa. —conté dejandola pasmada— Bueno no él, su madre me dio su firma dandome la custodia con tal de que conservara el apellido Smith y pudieran verlo los fines de mes que creo que nunca va a pasar.

—lo siento.

—no lo hagas fue una noche de borrachera y alusilojenos en una playa nudista, que me dio a mi bebé, si, pero no es como si Billy hubiera sido el amor de mi vida.

—no has tenido novio desde que quedaste embarazada.

—novio no, pretendientes muchos. —sonreí con diversión haciendola reírse cortamente— Como ese sheriff del año pasado, era guapisimo Maggie, lastima que era un hombre culto y honrado que amaba a la bruja de su esposa.

—creí que tu limite era que tuvieran argolla.

—ese hombre fue una excepción.

El resto del camino a la granja hablamos de cosas sin sentido para relajarnos del caos de nuestro alrededor, Maggie era un excelente compañia y de no ser porque eramos hetero, mi mejor amiga hubiera sido otra conquista dentro de mi lista.

Al llegar Maggie estacionó frente a su casa, me ayudo a bajar mis cosas de su maletero en lo que veíamos a su hermana Beth salir con su padre preocupados. Los dos nos hicieron muchas preguntas, que nosotras respondimos sin dudar, cuando dejaron de hablar es cuando Maggie le dijo a su padre que me quedaría con mi bebé en la granja.

—te conocemos, Mayra, no podriamos hecharte, menos con Luke en brazos.

—gracias Hershel.

—damelo, hace mucho que no lo veía. 

Con una sonrisa le pase a mi bebé que apenas tenia dos meses, cuando se iba alejando a la casa Beth me abrazó contenta. La verdad es que me llevaba bien con los Green porque hubo un tiempo que creían que Magiie y yo teniamos algo, trataron de conocerme al maximo, y eso salió a mi favor ya que consegui una familia de respaldo que ahora en tiempo de necesidad me daba un hogar.

—por suerte tenemos la habitación de invitados libres. —dijo Beth viendonos a mi y a Maggie dejar mis cosas en la cama de dicha habitación.

—la vieja cuna de Beth esta en el sotano. —Maggie me sonrió— Es de una buena madera, sigue intacta hasta ahora y podrias usarla para Judith.

—uh cosas gratis, genial.

—ayudame a traerla, seguro papá fue a mostrarle a Patricia el bebé.

Asintiendo segui a Maggie a su sotano donde Beth nos ayudo abriendo la puerta y prendiendo la luz, al bajar encontramos una cuna que estaba cubierta con una sabana llena de polvo, cuando la saque no pudimos evitar toser las dos mientras la rubia arriba se reía. Pronto la cargamos y la subimos aribba para llevarlo a mi nuevo cuarto, donde la acomodamos junto a la ventana, el pequeño colchon se tenia que lavar así que ese día mi bebé dormiria conmigo en la cama.

Pronto los días pasaron, también las semanas, ya me había acostumbrado a la vida granjera, había conocido a Otís, a Jimmy, Patricia. Todo parecia bien hasta que lastimosamente perdimos gente como la madrastra y el hermanastro de Maggie, que fallecieron a la semana de mi estadio en un intento de ir al pueblo, tanto Maggie como yo presenciamos todo y tuvimos que huír. Y al volver y contarle todo a Hershel inicio lo que yo llamo, la bomba atomica granjera. 

El granero comenzó a ser llenado de esas cosas por orden de Hershel, Otis los traía y nadie en la granja podia contradecir eso. Yo mantuve mi pico cerrado, solo obedecia hasta que un día mi bebé enfermo, no hubo los suficientes recursos, Hershel no lo pudo salvar y con mi corazón partido en miles de pedazos lo tuve que enterrar, no podia dejar que lo pusieran en el granero. 

Desde entonces mi vida comenzó a ser monotoma. Volvia a ser la Mayra que no le importaba lo que digan los demás. Los Green comprendieron o al menos trataron de entender mi dolor, Maggie estuvo ahí para mi y nunca me sacaron de la granja a pesar de mi rebeldía, solo lo dejaban pasar como sino pasara nada.

La cuna de Beth la queme, todas las cosas de Luke las queme e incluso su foto.

Empezaba desde cero de nuevo.

Y esta era mi nueva vida.

¡Bien este el nuevo inicio! Esperó que les haya gustado, no se porque nunca pongo Acto 1, pero bueno. Esta historia si bien es con Glenn en un inicio, a futuro será con Rick también. Y aclaro, la protagonista no es como Maggie como ven es una chica que fue fiestera y perdio a su bebé, ella no querra nada serio en un principio, internamente esta rota y poco a poco evolucionara. ¡Nos vemos pronto!