𝙼𝚘𝚗𝚊𝚛𝚌𝚊

Sería de día otra vez y ese día ha llegado

Si me pidieron un consejo por lo vivido en mi corta pero muy emotiva vida, les diría que:

No se obsesionen demasiado.

No se preocupen de más.

No le den valor a las cosas que no lo tienen.

Vivan cada día como si fuera su propio cuento; total, al final es lo único que nos queda.

No dejen de soñar.

No olvides lo que vales.

Y principalmente, no permitas que te den menos de lo que mereces.

Yo permití que me hicieran daño, dejé pasar las cosas, puse en un pedestal a personas que no lo merecían y que ni me querían realmente. Me sentí mal por todo lo bueno que había hecho, que ante mis ojos era nada, pero realmente era más valioso que todo lo que te podrían haber dado en tu vida. Luché con mi propia mente. Cambié y me juzgaron. Lo tenía todo en mí, pero no veía nada de ello. Me hice demasiado daño...

Y me dejó de importar todo sin haber merecido nada de lo que había tenido que sentir y vivir