Supervivencia (Cote MC)

SS.2 Kushida Kikyō - Dilema.

Ha pasado un mes y medio desde que me he unido a esta escuela. Desde que llegue a esta prestigiosa escuela han surgido eventos inesperados que no planee. Nunca pude esperarme que las cosas se salieran de mi control en el primer mes de la escuela.

Descubierta de mi mascara y amenazada por un individuo del que nunca pensé que sería un problema, no es para lo que vine a esta escuela.

Nakatomi Hiroki, una muy persona impredecible. Hasta el momento no estoy seguro de como él pudo saber de ese evento que sucedido en mi antigua escuela. Sospecho que fue la perra de Horikita, pero no parece ser que ese haya sido el caso.

El como obtuvo esa información no importa. Ahora estoy atrapada con él y no veo una solución por mucho que trate de pensar en una manera de deshacerme de él. E incluso con la amenaza que le hice a Nakatomi para destruir nuestra clase, no parece afectar al bastardo.

A pesar de que no estoy obligada a obedecerlo, cooperar con él no ha sido del todo malo. Al menos hasta este momento, pero quien sabe que puede pasar en el futuro. Sin mencionar el hecho que Nakatomi-kun pudo haber dejado el chantaje como seguro, pero el idiota bondadoso lo elimino. Una acción que me pareció estúpida, pero de nuevo se que Nakatomi no es estúpido, por lo que ha de tener un plan y sinceramente solo pensar en eso me da dolor de cabeza.

Pudo tenerme con correa y ordenarme cualquier cosa sabiendo que la cumpliría para proteger mi vida social, pero no lo hizo. Él no me ordenó hacer algo que pueda poner en peligro mi vida social, ni siquiera intento aprovecharse de mí.

Claro que he visto a Nakatomi mirar mi cuerpo varias veces, pero tiene un sorprendente autocontrol y no me mira de forma asquerosa como esos imbéciles y bastardos de Ike-kun y Yamauchi-kun. Esos dos deberían morir, cerdos asquerosos.

Y a pesar de la cara de cansancio que tiene Nakatomi. No se puede negar que es mas guapo que varios compañeros de nuestra clase, claro no era el más guapo, pero estaba en un lugar alto.

Tch. Bastardo lo que me hace pensar de él.

De todos modos, al contrario de lo que pensaba cooperar con Nakatomi no ha sido del todo malo, he podido conocerlo mucho mejor. El imbécil era bastante amable a pesar de ser un idiota que pudo lograr chantajearme, pero él también sabia cuando dejar de ser amable llegando a ser alguien que puede ser astuto, calculador, manipulador y frio.

Puedo pensar en varias cosas que Nakatomi es en mi mente, pero si algo de lo que se de ese tipo. Es que no es ingenuo. Y no habla de esa ingenuidad sobre las personas, sino sobre el mundo, pero no me sorprende dado que el bastardo es un huérfano. No se qué pudo haber visto Nakatomi-kun en su jodida vida de huérfano, pero sea lo que sea algo se había llevado esa ingenuidad.

No muchas personas se dan cuenta de ello, pero si le miras a los ojos el suficiente tiempo y tienes algo de oscuridad obtenido del mundo podrás darte cuenta de que detrás de esa mirada perezosa se esconde una persona fría hasta cierto punto.

Un claro ejemplo de ello es que no importa a que persona insulte. Ya sea a un amigo de esté o de un desconocido, ni como lo insulte. Incluso con la mirada pétrea de Nakatomi, él siempre me da una mirada de divertida indiferencia por todas las maldiciones que empiezo a lanzar.

Lo cual es bastante liberador. Poder tener a alguien que me escuche sin preocuparse por las consecuencias hace que mi pecho, junto con mis hombros se sientan mucho más ligeros. Sin mencionar que golpear las palmas del bastardo es bastante satisfactorio.

Son una sonrisa en mi rostro y después de alistarme. Me dirigí hacia el establecimiento escolar. Después de que otro día culminara normalmente. Los alumnos comenzaron a salir del salón de las clases ya no había necesidad de quedarse en la habitación.