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Después de sus tortuosas clases era tiempo de regresar a casa, particularmente sus horarios se extendían hasta salir tarde de la uni, casi atardeciendo. Estaba dejando algunas cosas dentro de su locker, cuando escuchó a lo lejos la voz de Jeongguk.

Pronto se sintió un poco nervioso porque no habían alumnos abundando los pasillos, muy pocos como el estaban hasta tarde, tal vez era su oportunidad pensó, pero su corazón se aceleró cuando sintió que la presencia del Alfa se acercaba acompañado de lo que parecían ser sus amigos.

No quería voltear, al parecer había algo muy interesante en su casillero, una clara mentira para pensar en como salir de ahí sin verse apresurado. Jeongguk por su parte junto a Yoongi caminaban juntos hacia el casillero del más pálido, que para mala suerte de Taehyung quedaba en el mismo pasillo que el suyo.

Claro que la presencia de Taehyung no pasó desapercibido para el azabache, que escuchaba las quejas de Yoongi mientras dejaba por completo sus libros sin ningún cuidado, pero su mirada estaba sobre el otro Alfa de cabellos castaños e incluso diría que con toques rubios.

Sabía quién era, Kim Taehyung, el Alfa de los sueños más húmedos de la hermana de Yoongi. Las pocas veces que lo había visto había concluido de que era un Alfa raro, su circulo social en general era raro, siempre había pensado que el omega que estaba a su lado la mayoría de veces era su pareja pero grande fue su sorpresa cuando se enteró que ese omega de nombre Jimin estaba en la lista de omegas que Namjoon tenía detrás.

Pero ahora que lo tenía a tan solo unos pasos decidió acercarse olvidándose de Yoongi quién seguía en su mundo quejándose del profesor de cálculo.

"¿Taehyung, cierto?" Preguntó sacando al mayor de sus pensamientos abrumadores.

El mencionado duda unos momentos antes de voltear a verlo, el aroma de Jeongguk inundando su ser y sus ojos tan bonitos que lo hacía dudar si en verdad el chico frente suyo era un Alfa.

"Solo quería decirte que el entrenador de basquetbol me pidió preguntarte si te gustaría comenzar a hacer practicas." Su voz no era grave, ni fuerte, parecía más bien suave junto con su mirada que no dudaba en mantener contacto visual. "Ya sabes, te ha visto y cree que puedes llegar a ser un buen jugador."

"Yo-"

"No te preocupes si no quieres, no todos los Alfas están hechos para esto." Aquello sorprendió al mayor quién no se esperaba que indirectamente lo tachaba de ser diferente.

"¿Perdón?"

"Sí, ya sabes, tal vez eres uno de esos Alfas que prefiere ir a hacer cosas de omegas." A pesar de que su mirada parecía tan serena su voz reflejaba burla, cosa que empezaba a molestar a Taehyung.

"O tal vez prefiera invertir mi tiempo en algo más que en estar en un equipo liderado por un Alfa de papel."

Ante lo dicho el menor solo sintió rabia creciente reflejado en su expresión tan seria y unos ojos que mataban al mayor.

"¿Acaso te ofendiste, cachorrito?" Taehyung soltó con una sonrisa llena de burla por la expresión del azabache. Sabía que era así de egocéntrico y presumido, pero lo había descolocado totalmente sus comentarios, que empezó a cuestionarse sobre como era en verdad y sus pensamientos sobre los Alfa que para Jeongguk eran "raros".

Y de un momento a otro Jeongguk sonrió sin mostrar los dientes, para luego dar un suspiro y decir: "No realmente, en realidad me haz dejado claro que 'tipo' de Alfa eres, un enfermo y un asco total para la casta."

Y con ello Jeon se dió vuelta hacia Yoongi quién observó todo y solo le dedicó una mirada a Taehyung que no supo descifrar, pues incluso diría que era de pena; pronto los vió irse, dejando a un Taehyung aturdido por lo que acaba de pasar.

Se lo hubiera esperado de cualquier otra persona aquel comentario, incluso se lo esperaría de su madre, pero no de Jeongguk con quién apenas habían cruzado siquiera miradas.

¿Le tenía que importar?

No debería, lo sabe, pero genuinamente sentía una decepción hacía su ser, y más aún sabiendo que su lobo estaba enganchado por el otro Alfa, porque el fácilmente podría evitar al azabache, pero su lobo no.

Y dolía, dolía porque se dió cuenta que Alfas como el, eran más propensos a quedarse solos por el resto de su vida.

Regresó a su casa, con su lobo desanimado y un Taehyung fastidiado, no le importaba lo que el azabache pensara sobre sus gustos, porque si lo analizaba, todo se lo sacó de su culo pues Taehyung jamás había dado algún indicio sobre 'aquello'; lo que realmente le fastidiaba era su lobo obstinado y resentido por las palabras hirientes del menor.

Directamente fue a su habitación, tenía que estudiar pero sus ánimos estaban por los suelos y terminó por dormirse, nunca habría pensado en que su primera interacción con su crush fuese así de punzante en su ser.

Un Alfa Inusual • Taegguk Donde viven las historias. Descúbrelo ahora