El Fin de una Era

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–Pasado–

''Cuando desperté todo lo que veía eran cenizas, escombros, no podía sentir cómo se movía mi pecho, un líquido caliente bajaba de éste que hacía mi brazo mi cuerpo estaba paralizado y inerte, entonces escuche unas voces, de unas personas, unas luces que se dirigieron hacia mí....resulta, que todavía no estaba muerto

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De qué vale vivir en esta porquería de mundo si todo da igual, de qué sirve ser bueno si todos te traicionan, de que sirve salar a la gente si tendrás que matar a muchos más

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De qué sirve amar, si todos a los que amas morirán''

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Existir en este mundo es lo mismo

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Kuron: Que estar muerto...

–Unas luces, parpadeos, cerró los ojos y todo lo que escuchaba eran voces aleatorias, personas de blanco, máquinas alrededor el respirar con dificultad, el sentir que ni siquiera podía respirar, pero lentamente comenzaba a distinguir las voces en medio de su lucidez lentamente el chico se estaba dando cuenta de lo que estaba pasando–

Médico: ¡¿Está loco doctor?!, ni siquiera sabemos la identidad del chico, no tenemos su consentimiento ni registro, ni siquiera sabemos si resistirá la cirugía no podemos instalar un corazón así como si nada –respondía el doctor con una cara borrosa–

Doctor: No hay remedio, ¿Qué no lo entiendes?, las Máquinas para suspender los corazones quedaron completamente dañadas, solo lo tenemos a él para no perder nuestro corazón faltante –decía un doctor entre murmullos y destellos–

Médico: Su vida no vale la pena –hablo el doctor que parecía señalar al chico–

Doctor: Este corazón, es todo lo que se pudo salvar del incidente de aquel hospital ¡Haré lo necesario para salvar el legado del instituto Alan!-respondía mientras volteaba al chico y el médico se quedaba en silencio– Tráiganme la anestesia... no se quien eres, ni qué fue lo que paso ahí, pero te necesitamos salvar, necesitamos que vivas para portar este corazón faltante pronto terminara esto-decía con seguridad-

–El doctor me coloco una máscara que soltaba un gas extraño pero no me podía mover, intente hacerlo pero mi cuerpo no respondía, ni siquiera mis ojos podían abrirse y de la nada sentí algo, algo afilado en mi pecho, un dolor insoportable quería gritar, quería llorar, quería saltar, ese dolor en el pecho seguía presente, pero no podía hacer nada, solo podía morir y seguía entrando ese dolor punzante dentro de mi pecho abriendo más, más y más, el infierno volvió a mi cabeza cuando me di cuenta de que era consciente de lo que me estaba pasando–

Doctor: Tráiganme, el bisturí..

''No de nuevo, otra vez no, no

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Por favor no quiero pasar por esto, solo mátenme, duele mucho, duele mucho, solo déjenme morir mátenme

-Lycoris Recoil: El Camino del Destino-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora