Womenlarnd; Daerin (G!P)

Capítulo 7

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El hotel a donde Danielle fue llevada por la taxista era uno de esos que se podían ver en carreteras lejanas, de hecho Danielle sabe que está en una zona algo apartada de la ciudad y que su viaje por suerte no le costó tanto, la señorita fue muy amable, pero Marsh no debía confiarse demasiado.

La casera fue algo grosera, sin embargo envió a su hija de 15 años para ayudar a la nueva huésped a llegar al primer piso. ─Mujer, ¿cuántas cosas tiene en su maleta? ─bromeó la chica y Danielle la miró mientras caminaban por el pasillo. Inmediatamente al salir del pequeño departamento te encuentras en el piso alto y el barandal, como si fuera un balcón donde Danielle puede asomarse cada mañana, pero también hay un departamento frente a ella y se pregunta en breve quién, o quiénes estarán ahí dentro.

─Muchas cosas de turistas. ─mintió Danielle. Se registró como turista, qué falso, ¿no? ─Entonces tu nombre es ¿Chiquita..?

─Así es señorita. ─Chiquita sacó la caja de cigarrillos y se la entregó a Danielle. Danielle le entregó el dinero. ─¡Gracias! ─Danielle no dijo nada. Chiquita era la hija de la dueña de todo ese lugar, un hotel poco transitado y muy deprimente, pero la joven vendía cigarrillos a las mujeres huéspedes. Danielle no planeaba fumar, pero lo haría. ─Aquí están las llaves.

─Gracias.

La llave tenía un lazo de goma rojo con el número 3, la habitación de enfrente era la 4. Cuando Danielle entró, se encontró con un lugar bastante pequeño. Este hotel es para quedarse unos días y pedir comida de la calle. Danielle bajó la cabeza, suspiró.

─Todo estará bien. ─se dijo a sí misma. De repente su estómago gruñó y la joven detrás de ella rió.

─¿Tienes hambre?

─Yo-...

─Tranquila, puedes ir conmigo. Puedo darte de comer en la cafetería cercana. ─Danielle se giró para mirarla avergonzada.

─¡Oh no! No te preocupes, yo me encargo. ─"Yo debería de pregúntarle si tienen algún trabajo que ofrecerme ahí." Se dijo Danielle. ─Ahm... oye, ¿de casualidad ese lugar ofrece trabajo?

─¡Sí, están buscando dos nuevas empleadas! Puedo ir después a avisarles. O puedo buscarte y puedes venir conmigo. ─Danielle asintió encantada, también conmovida. "¿Por qué tengo ganas de llorar? ¡Solo quiero ir a casa! Volver a saludar a la gruñona vieja Martha y hablar con Yunjin sobre la universidad y disfrutar de su comida pésima" ─¿Te encuentras bien...? Te veo-

─...

Danielle dejó de hablar. 

Alguien llegó al piso. Obviamente una mujer. Una mujer que sin duda intimidó a Danielle. Se acercaba cada vez más, y resultó ser la chica de la habitación 04. "Maldita sea."—¿Quién es? —Danielle lo dijo en voz alta y Chiquita la miró. —Oh, tonta... —Marsh se tapó la boca para sí misma.

—Será mejor que te busque en un rato. —Chiquita tragó saliva. Ella sabe quién es esa chica, no ha causado tantos problemas, su amiga sí, pero la joven kang no estaba a salvo de muchas cosas que dijeran que es una fémina completamente buena. —Te espero abajo.

—Ok. —Danielle entró a su habitación y cerró la puerta.

Después de 22 minutos, buscó a Chiquita.

La había rechazado bastante con la comida. Pero en cuanto Danielle probó las papas fritas, le agradeció a la cocinera y al cielo, a dios. ¿O acaso dios era una diosa en este universo? ¡Pues ni siquiera lo sabe! ─Tenías mucha hambre. ─Dijo Chiquita preocupada.

─¿Qué? Es normal tener hambre...

─¿De verdad eres una turista? ─Chiquita rió nerviosa.

"Oh, niña, tengo tantas cosas por relatar."

La noche estaba por llegar cuando salieron de la cafetería/restaurante, iban a ser las seis y media de la tarde. Chiquita fue muy amable, Danielle fue contratada de inmediato "Ni siquiera me pidieron un currículum". Tendrá que esperar un día entero antes de trabajar con la nueva empleada.

A la mañana siguiente volvería a encontrarse con Chiquita, la muchacha le daría el uniforme de trabajo, ni siquiera Danielle entendía por qué lo consiguió gratis. Su madre no parecía preocuparse tanto por su hija.

Cuando iban a ser las nueve de la noche Danielle seguía sin poder dormir. Pensaba, pensaba y pensaba.

¿Estaba preocupada Yunjin, o solo consideró que su compañera de piso se marchó y Martha por fin podría traer a la nueva chica que pagaría correctamente la renta?

Danielle agarró el paquete de cigarrillos y el encendedor.

Salió de la habitación del hotel justo a tiempo cuando ya estaba la otra chica apoyada contra la barandilla del primer piso. Parecía que estaba fumando.

─Hola. ─La mente de Danielle se puso a jugar, pero saludó con la mano y con una confianza que ni ella misma sabe de dónde sacó. Se inclinó y miró a la chica que estaba a su lado. La luz de la luna se reflejaba sobre su perfil y había algo entre sus labios mientras usaba el yesquero.

Eso no es un cigarrillo.