•° capitulo doce °•

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⚠️ advertencia  ⚠️
Este capítulo tiene escenas +18
Lee bajo tu propio riesgo

El albino gimoteo de tristeza al no escuchar respuesta, talvez no lo quería ayudar, fue un idiota al pedirle algo así

— llego en quince minutos.. — fue lo único que se escucho salir del alemán, este colgó. —

— el albino se alegro demasiado, tomó sus muletas y con la cordura que le quedaba bajo las escaleras esperando paciente en la sala. —

Chase llegó tan rápido como dijo, Marshall con dificultad le abrió, estando cara a cara Marshall destruyó ese silencio abrumador aferrandose a el

Oliendo el aroma del alemán en su camisa, se sentía más aliviado que antes pero rápidamente volvió a sentirse acalorado

— Chase... — volteo a verlo con sus ojos lagrimosos. —

— oh dulzura.. necesitas de mi ayuda eh?...

— ayúdame porfavor... me siento mal...

— el aleman comenzó a acariciar su cabeza, recibiendo leves jadeos de su parte. — nunca as pasado tu celo?

— p..pastillas..

— pastillas... son malas a tu salud.. — lo cargo dirigiéndose hacia el cuarto del albino. —

— este solo se aferro al cuello del alemán tratando de callar su jadeos. —

— cuando llegaron el aleman lo acostó en la cama con delicadeza y después el se sentó alado suyo, tratando de controlar sus instintos al sentir las feromonas del omega. —

— alfa.... ayúdame porfavor.. — el omega se levantó como pudo y se aferro a la espalda del alemán. — alfa..

— dulzura no puedo contrarme si me llamas así..

— entonces no te controles... necesito tu ayuda alfa... — empezaba a sentirse más acalorado, no ayudaba estar cerca de un alfa que no hacía nada. —

El alfa dio el primer paso, se volteo contra el albino y le proporciono un beso francés para calmarlo un poco

Los gemidos ahogados del albino burbujeaban el las bocas de ambos, Marshall se sentía complacido pero no satisfecho

Marshall se aparto del beso, volteando a ver a Chase con anhelo

El aleman comprendió y bajo sus besos a su cuello, comenzando a dejar mordidas en su cuello

— ah~!... Chase~... más... más porfavor~...

— no te muevas... romperas el llezo...
— exclamo con leve frialdad, el albino soltó un leve sollozo de arrepentimiento.—

— l..lo siento Chase~... — soltó un leve suspiro, depronto un leve jadeo de dolor y sorpresa al sentir una fuerte mordida en el costado de su cuello. —

— ya no soy alfa?... —dio una leve risita divertido, volteo a verlo juguetón. —

— alfa... — sus instintos pedían ya no ser virgen, volteo a ver con tristeza al aleman. — alfa... porfavor alfa~.. mi vientre duele~..

𝑀𝑖 𝑒𝑠𝑡𝑟𝑒𝑙𝑙𝑎 𝑑𝑒 𝑏𝑎́𝑠𝑞𝑢𝑒𝑡𝑏𝑜𝑙Donde viven las historias. Descúbrelo ahora