i miss you im sorry | descendants

I

                                                                 9 years later
                                                                 - December -

───── EL FRÍO INVADÍA LAS CALLES AL IGUAL QUE LA NIEVE QUE LLEGABA A CUBRIR POR COMPLETO LAS COSAS. El toque de queda empezó en Auradon, empezaba a las 9 de la noche, el Rey Ben decidió esto por seguridad y protección de los habitantes de la preparatoria y reinos. El aire helado le dificultaba más el paso a Evie, la cual tenía media hora de retraso, el toque de queda había empezado y ella seguía afuera, se había distraído en el camino hasta que se dio cuenta de la hora. Sus mejillas estaban rojas y por igual su nariz, aceleró el paso a su castillo, el cual no era tan grande por que con el paso de los años decidió tener uno pero moderado. Algunos ruidos en el camino la llegaban a asustar por que las calles estaban completamente solas, algún que otro pequeño animal llegaba a pasar por ahí, pero ella era la única persona que se encontraba fuera de su hogar.

Llego a su castillo, al entrar dejo su chamarra y gorro, decidió sentarse unos minutos para tomar calor gracias a su chimenea que tenía en la sala, se recostó durante unos minutos pero la misma imagen en su mente apareció, abrió los ojos de golpe, se le hacía absurdo seguir pensando en ella en la mujer a la que le rompió el corazón años atrás. Suspiro pesadamente y camino hasta llegar a la azotea, el frío la recorrió y la hizo estremecerse de inmediato pero le dio igual y dirigió su vista al gran castillo que quedaba muy lejos del de ella, pero por lo grande que era podía verse un poco. Un nudo en su garganta se formó, mentiría si digiera que no la extrañaba o que no se arrepentía, apesar que la culpa y remordimiento la consumían viva también la extrañaba todos los días, su compañía la lograba hacer sentir mejor, aún recordaba cuando llegó a Auradon, ella fue la primera persona en hablarle sin miedo por ser hija de una villana, pero su corazón dolía al recordar algunas de las últimas palabras que le dijo, el hecho de que antes de desaparecer por completo había dicho que era igual a todos, eso le dolería siempre, ser igual que su madre jamás llegó a ser buena opción.

Estaba hundida en sus pensamientos, tanto que ya ni si quiera sentía el frío, hasta que un estruendo en el cielo la hizo pegar un salto del susto, puso su mano en su corazón para tranquilizarse, aquel estruendo terminó en la punta del castillo de la reyna Allysa. Aun que no se podía ver a la perfección, se veía el pico del castillo, y ahí fue donde terminó el provocante de su susto. Se metió de nuevo, abandonado la azotea, su celular timbró, era Audrey, aún que en el pasado hubieron problemas entre ellas por así decirlo, pudieron arreglar todo maduramente  hasta ser muy buenas amigas, tomó el celular en sus manos y contestó la llamada, aún que estaba intentado ponerle atención a la hija de Aurora le era imposible por que su vista estaba centrada en la dirección donde estaba aquel castillo, se acercó a la ventana intentando ver más pero fue imposible. Audrey le insistió en que asistiera a la pijamada en la que estaría Mal y Lonnie, por que Jane al igual que Allysa había decidido desaparecer de la vista de todos, era raro cuando se llegaba a dejar ver.

Rechazó la idea de ir a la pijama, contestó que tenía algo importante que hacer, Audrey entendió y terminó la llamada. La peli azul decidió volver a tomar su abrigo y gorro nuevamente, salió del castillo y se adentró al oscuro bosque. En el camino era inevitable no sentir miedo, los ruidos de animales se escuchaban por todas partes. Llevaba aproximadamente 3 horas caminando en el frío y la nevada, sus pulmones estaban casi sin aire, decidió tomar un descanso y se sentó en una pequeña piedra, tomó su pequeña bolsa para verificar si traía algo para calentarse hasta que encontró su encendedor, lo prendió y lo puso entre sus manos para calentarlas, después de recuperarse se volvió a levantar.

Ahora le faltaba menos de la mitad para llegar, pero se sentía demasiado mal, empezó a seguir caminando como podía hasta llegar a la parte trasera del castillo de la reyna Allysa, intento ver cómo entrar sin ser vista, sigilosamente subió sobre una gran roca e intentó ver por una ventana, la ventana daba hacia la gran cocina que había ahí, con sus pocas fuerzas intentó abrirla y para su buena suerte abrió, entro haciendo demasiado ruido y alertando a todos los del castillo. Al caer al piso de la cocina perdió la conciencia, lo último que recuerda haber visto fue a un guardia avisando que alguien había entrado.