Capítulo 8

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Corazones rotos.









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Una semana había pasado desde que las mellizas Swan descubrieron el secreto que ocultaban los Cullen.

Una semana desde que Bella y Jasper se hicieron novios.
Se la pasaban juntos, las hermanas ya casi no se veían por el cambio tan repentino de Bella, Adhara estaba feliz por su hermana pero preocupada por ella; en primera porque a pesar de que el chico la quiere no dejaba de ser un vampiro, la segunda porque temía qué desarrollara una dependencia emocional en el, en tercera porque estaba dejando de lado a todos, incluidos ella y Charlie.
A pesar de que la mayoría de los Cullen mostraba desacuerdo hacía la idea de su hermano con Bella, Jasper estaba enamorado de ella, la cuidaba, en ningún momento la dejaba sola. Respondía todas las dudas qué ella tenía de su mundo.

Y más de una semana de la desaparición de Paul.
Adhara iba todos los días a su casa, a esperar noticias junto al señor Luke Lahote, otras veces cuando le permitían, se unía a los equipos de búsqueda, los últimos dos días en cambio; Jacob y ella se aventuraron el el bosque, en búsqueda de su amigo, pero los resultados eran los mismos.
El domingo, su último día de búsqueda ellos llegaron a creer que tal vez no quería ser encontrado, Adhara preparó unos pastelillos y Jacob llevó unos sandwiches, llevaron también agua y se adentraron en el bosque hasta llegar a una distancia prudente, dejando al pie de un árbol la mochila con la comida.
De lo que ellos no se percataron, fue que estaban siendo observados por tres pares de ojos.









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Durante toda la semana estuve recibiendo detalles de una persona, flores o algún dulce.
Siempre encontraba chocolates en mi asiento antes de comenzar cada clase, cuando estaba en la cafetería siempre llegaba una chica de primer grado con una flor que tenía una nota atada al tallo.

"Tus ojos son hermosos"

"Deberías sonreír más"

Swan: La Leyenda. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora