Dos años después:Gohan y Akira se miraron entre sí, y sin necesidad de decir una palabra, supieron qué tenían que hacer. Se levantaron y se dirigieron hacia la ubicación de las Esferas del Dragón.
Después de reunir las siete Esferas, Gohan se arrodilló en el suelo y unió las manos. "¡Por favor, Shenron, reviva a mi hijo Kaidox!", gritó Gohan.
Shenron, el dragón legendario, apareció en el cielo y miró a Gohan con sus ojos sabios. "¿Estás seguro de que deseas revivir a Kaidox?", preguntó Shenron.
Gohan asintió con la cabeza. "Sí, por favor, revívalo".
Shenron asintió y extendió su mano. Un rayo de luz blanca salió de su mano y cubrió el cuerpo de Kaidox. La luz se intensificó y el cuerpo de Kaidox comenzó a brillar.
De repente, Kaidox abrió los ojos y se sentó. Miró a su alrededor, confundido, y luego vio a Gohan y Akira sonriendo a su lado.
"¿Qué... qué pasó?", preguntó Kaidox, aún confundido.
Gohan sonrió y abrazó a Kaidox. "Estás vivo, hijo mío. Las Esferas del Dragón te revivieron".
Kaidox miró a Gohan con una expresión seria y dijo: "Papá... te dije que no usaras las Esferas del Dragón para revivirme".
Gohan se sintió culpable y miró a Kaidox con una expresión de arrepentimiento. "Lo sé, hijo mío... pero no pude soportar la idea de perderte. Quería que estuvieras conmigo".
Kaidox sacudió la cabeza. "No deberías haberlo hecho, papá. Me dijiste que me amabas, pero no me escuchaste. Quería irme en paz, sin que nadie sufriera por mi causa".
Gohan se sintió abrumado por la culpa y la tristeza. "Lo siento, Kaidox... no sabía que te sentirías así. ¿Qué puedo hacer para arreglar las cosas?"
Kaidox miró a Gohan con una expresión triste y dijo: "No hay nada que puedas hacer para arreglar las cosas, papá. Solo quiero que me prometas que respetarás mis deseos si algo así vuelve a suceder".
Gohan asintió con la cabeza, sintiendo un profundo arrepentimiento. "Te lo prometo, Kaidox. Respetaré tus deseos, no importa lo difícil que sea".
Kaidox asintió con la cabeza, pareciendo aceptar la promesa de su padre. Luego, se levantó y se alejó de Gohan, dejándolo sumido en la culpa y la tristeza.
Kaidox se detuvo y se volvió hacia Gohan, con una sonrisa débil en su rostro. "Venga, papá... vamos a casa", dijo Kaidox, extendiendo la mano hacia Gohan.
Gohan se sintió aliviado al ver que Kaidox estaba dispuesto a perdonarlo y seguir adelante. Sonrió y tomó la mano de Kaidox, sintiendo un gran alivio y gratitud.
"Vamos a casa, hijo mío", dijo Gohan, abrazando a Kaidox. "Estoy orgulloso de ti, Kaidox. Eres un guerrero fuerte y valiente".
Kaidox sonrió y se abrazó a su padre, sintiendo un gran amor y respeto por él. Juntos, caminaron hacia su hogar, listos para enfrentar juntos cualquier desafío que se presentara.
Kaidox, acompañado de su padre Gohan, llegó al planeta de Bills, donde Goku y Vegeta estaban entrenando. Los dos guerreros se detuvieron al ver a Kaidox y Gohan, y sonrieron al saludarlos.
"¡Hola, Kaidox! ¡Bienvenido al planeta de Bills!", dijo Goku, extendiendo la mano para saludar a Kaidox.
Vegeta también se acercó, con una expresión seria. "Kaidox, he oído que tienes un gran potencial. Estoy dispuesto a entrenarte y ayudarte a alcanzar tu máximo potencial".
Kaidox sonrió, emocionado de tener la oportunidad de entrenar con dos de los guerreros más poderosos del universo. "¡Genial! Estoy listo para entrenar", dijo Kaidox, preparándose para comenzar su entrenamiento.
