❥︎𝐒𝐨𝐲 𝐑𝐞𝐠𝐮𝐥𝐮𝐬 𝐁𝐥𝐚𝐜𝐤 ᵛᵒˡ·¹

˗ˏˋ𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 024'ˎ˗

_¡No te me acerques!_ Gritó teniendo otra arcada.

_Lo siento Reggie_ Se disculpo ayudándolo a levantarse.

_Imbécil, ¡te dije que me bajaras!_ Lo golpeó en la cabeza. _¡Y No me llames así!_

Ahora sentía que había sido muy mala idea seguir a Sirius.

Al adentrarse a la casa de los gritos jamás esperó que el lugar estuviera tan bien ordenado.

Todavía impresionado, se recostó en la única superficie blanda que existía en ese lugar, el sillón.

_Qué haces_ Dejo de abrazar los cojines y se puso en alerta cuando Sirius se hecho a su lado.

Algo en su aura había cambiado.

Cuando lo miró de cierta forma, se veía... Diferente.

_¿A caso no puedo acostarme en mi propio sillón?_ Se defendió.

_Puedes, pero no conmigo sobre el_ Espetó intentando levantarse. _ ¿¡...!?_ Su cuerpo había sido jalado hacia atrás quedando recostado nuevamente, la única diferencia es que ahora le estaba dando la espalda a Sirius.

_No huyas_ Susurró Sirius, en su oído, causándole escalofríos.

_Suéltame_ Habló entredientes sintiéndo una mano meterse lentamente por debajo de su camisa.

La desesperación lo inundó por completo.

_¡Sirius!_ Se removio.

Sirius empezó a morder su cuello mientras colaba una mano dentro de sus pantalones.

_¡No!, ¡Por favor!, ¡No quiero!_ Le suplicó. _¡Detente!, ¡Sirius, por favor!_

Sollozo fuerte resistiendo con todas sus fuerzas los toques ajenos.

¿Qué sucede cuando una pequeña flor es arrancada cruelmente desde su raíz?

Bueno, una flor no siente dolor, así que no le duele.

Oh, tal vez eso es lo que nosotros creemos.

Solo porque no grita...

Solo porque no llora...

Solo porque no se lamenta...

Creemos que las flores no sienten.

Regulus estaba completamente desnudo acurrucado bajo una manta, solo había un pequeño espacio en la zona de sus ojos, ojos perdidos que se encontraban mirando todo y nada.

Sus pestañas revolotearon unas cuantas veces encontrando la forma borrosa de Sirius aún con el torso desnudo sentado cerca de sus pies.

El estaba fumando.

A su alrededor había un aura
extraña y oscura.

'Te odio'

...

Cuando despertó ya era de noche.

Sirius no se veía por ningún lado.

Aprovechando eso, agarró su ropa y se vistió rápidamente. Salió debajo del sauce boxeador que menos mal se encontraba que se encontraba dormido y se fue rumbo al castillo.

En todo el camino las lágrimas no pararon de rodar por sus mejillas.

...

La mayoría de estudiantes se encontraba en el gran comedor, por lo que al momento de ingresar a su habitación se halló solo.

Entró al baño y dejó que la bañera se llenera de agua caliente, se deshizo de su ropa con la promesa de que la quemaria más tarde en cuanto supiera donde se encontraba su varita.

Una vez que la bañera estuvo llena hasta el borde, se restregó el cuerpo con una esponja hasta dejar ciertas partes de un roja brillante, en todo el proceso había vuelto a llorar.

Cuando terminó, se sumergio hasta que el agua tocara su barbilla y se abrazó a si mismo en intento de encontrar consuelo.