Capitulo 5

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- 'Bito

- No

- Vamos 'Bito, por favor.... te pido una pequeña ayuda – Obito rodó los ojos

- Fuiste tú el que dijo semejante estupidez, asúmelo

- Pero Itachi no me quiere hablar

- Yo tampoco quiero hablarte Kakashi- el Anbu lo miro con cara de cachorrito apaleado, así que suspiro

- Por favor...

- Bien, voy a ver qué puedo hacer

- ¡Sí¡ - el anbu no limito su impulso y le estampo un beso

- ¡Estamos en la torre del Hokage¡- se quejó Obito

- Lo siento, lo siento- replico un poco incómodo mirando a todos lados, no había nadie por ahí

- Lo que digas- le quitó importancia al asunto y luego extendió la mano

- ¿Qué sucede? – preguntó confundido

- Necesito dinero- Kakashi saco su billetera y le iba a entregar unos billetes cuando Obito se la quitó y sacó bastantes, el Anbu elevo una ceja

- Esa es mi billetera – dijo, pero fue completamente ignorado

- Adiós- fue lo único que le dijo Obito, como si nada hubiera pasado

-Me robaron- se dijo a sí mismo y no pudo evitar reírse, eso ya había pasado un par de veces

Bueno, lo que sea con tal de reconciliarse con su kohai, se supone que había ido a disculparse y seguramente Itachi lo hubiera perdonado, si no hubiera le hubiese dado un sermón sobre la importancia de cumplir las reglas y las expectativas de tu clan, sin tener en cuenta una simple calentura, después de eso Itachi salió de la oficina casi partiendo la puerta cuando cerro y peor fue cuando le conto a Obito, quien solo lo miraba con esa expresión de eres un idiota

****

- Ey, Hatake nos invitó a almorzar- Itachi levanto la mirada y lo observo incrédulo

- Hatake nunca paga

- Lo que significa que está arrepentido- respondió sonriendo, el menor desvió la mirada

- No quiero ir con él a ninguna parte- dijo sonando molesto

- No iremos con él, solo va a pagar y nosotros tendremos una charla- Itachi lo miro analizando la situación

- Creo que lo de ustedes es más serio de lo que incluso ustedes creen- Obito se río

- Aunque no pasara nada entre nosotros, igual me hubiera enviado- replico divertido

- Si tú lo dices – respondió

- Ven, vamos, muero de hambre

- ¿A dónde iremos? - preguntó levantándose y Obito sonrió

- Déjame ver cuánto pude robarle y te digo

- ¿Robarle? - pregunto divertido

-Si fuera por él, nos hubiera enviado a almorzar al puesto de la calle- ambos estallaron en carcajadas

- ¿Por qué tanta felicidad? - pregunto Kurenai, viéndolos salir, Obito iba contando el dinero, se habían hecho cercanos estas semanas que habían trabajado juntos

- Vamos a almorzar ¿vienes? Hatake invita

- El nunca paga- los dos hombres se echaron a reír

- En el camino te contamos

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