Paraíso Andrés

Cápitulo 1

VERANO DEL 2014
- ¡Laura! ¿Lo has cogido todo?- preguntó Mercedes, la madre de Laura, en la puerta de su habitación.
- Siii mamá, venga vámonos ya- contestó Laura mientras recibía una llamada de María.

*Llamada*
- ¿Tía cuanto te queda? Ya han llegado todos- Dijo María alegremente.
- Ya voy, ya voy. No me seas impaciente. Por cierto ya ha llegado...- Preguntó Laura casi susurrando.
- Siii Lau ya ha llegado Sergio, y tranquila que está más guapo que el año pasado- exclamó María.
- Ey Ey Ey bonita que se te van los ojos, que aunque no este ahí se donde estas mirando- dijo Laura fingiendo estar enfadada.
- Tranquila, tranquila todo para ti- aclaró María entre risas.
*Fin de la llamada*

40 minutos después Laura llegó al pueblo.
Entro en su casa, era un chalet pequeño, de una sola planta, pero tenía una piscina enorme.
Se podían escuchar unos gritos, provenían de la casa de su vecino, así que fue a ver que ocurría.
Estaban todos allí: María, con la que había hablado minutos antes por teléfono, Pilar, la prima de María que también era su amiga, Andrés, su vecino y por supuesto estaba Sergio, el chico que hacia que esta perdiera la cabeza cada vez que lo veía.
En esta ocasión Laura se fijo mucho en Andrés, estaba cambiado, era más alto, sus ojos avellana ahora parecían tener un tono verdoso. Lo que no había cambiado era aquella preciosa sonrisa de la que Laura se enamoró una vez, cuando todavía era una niña y no tenía nada claro en la vida.
Se puso rápidamente su bikini nuevo, cogió una toalla y fue corriendo a bañarse con sus amigos.
Entró por la puerta y se dirigió a la piscina, al llegar todos la saludaron y entre bromas y salpicones consiguieron tirarla al agua.

*NARRA SERGIO*
Acababa de llegar y vi a María hablando por teléfono, por las risas que llevaba parecía que hablaba con Laura.
Uf que ganas tenía de ver a Laura, en invierno no nos hemos visto mucho y a sido difícil hablar por skype.
Llegaron todos y nos empezamos a bañar en casa de Andrés, al poco rato apareció alguien por el largo pasillo exterior que había en casa de este.
Era Laura, iba tan guapa, llevaba un bikini rosa fosforito, le quedaba genial, estaba ya un poco morena pero no mucho y el rosa del bikini hacia que pareciese más bronceada.
Se acercó a mí y me dió dos besos, en ese momento me fije en sus ojos marrones que con el sol se habían vuelto avellana, seguía teniendo esas pequeñas pecas en la nariz y parte de los mofletes que le hacían un toque muy mono. Se había dejado flequillo, que le quedaba muy bien también.
"Si es que es perfecta" pensé.
En ese momento decidí que ese verano iba a ser diferente para mí y para ella.

Lo que Sergio no sabe es que sí, el verano va a ser diferente pero el no saldrá bien parado y parte de la culpa la tendrá su amigo Andrés.