Gran Extranjero [ overlord x Fate ]

capitulo 45

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Autor: Russian Reversal.

Ainz se movió lentamente por las calles de la ciudad, tratando de mantener el mismo ritmo que Nero, mientras miraba a su alrededor.

"Todo por aquí parece tan..." - Ainz pensó por un segundo, eligiendo su palabra - "Pacífico..."

La situación a su alrededor parecía completamente diferente a la de la Singularidad anterior.

Allí, en el campamento del ejército francés, Ainz podía ver a soldados cansados esperando su inevitable destino, tratando de reírse de chistes inapropiados, afilando espadas y mirando con cautela al cielo, esperando la llegada de un nuevo monstruo, mientras que aquí, en esta ciudad, la gente simplemente hacía lo suyo.

Alguien llevaba una carga pesada sobre sus hombros, algún comerciante estaba vendiendo sus productos a clientes potenciales, algún tipo estaba mirando a su alrededor, buscando a la persona o cosa que necesitaba encontrar; todo parecía tan pacífico para Ainz.

"Y hay tanta vegetación..." - Ainz miró una hilera de árboles plantados a los lados del camino. En su mundo, Ainz rara vez veía vegetación, tal vez un par de veces cuando logró llegar a una granja interna para ciudadanos ricos, cuando era vendedor...

Una mujer le gritó a un niño de sólo cinco años, que estaba corriendo por la calle, después de lo cual el niño frunció el ceño y se acercó a su madre, quien tomó su mano y se hizo a un lado, ocupándose de sus propios asuntos.

Ainz sintió una pequeña sonrisa aparecer en su rostro contra su voluntad.

"Qué asco", y por supuesto, la voz de Cainabel hizo que Ainz frunciera el ceño instantáneamente.

'¿Por qué necesitabas arruinarlo todo?' - Ainz suspiró, haciéndole una pregunta a la chica.

"¿Es ese el emperador Nerón?" De repente escuchó una voz de uno de los transeúntes.

Un segundo después alguien respondió: "Sí, sí, ¡es ella seguro!"

Ainz no tuvo tiempo ni de dar diez pasos antes de que los clamores habituales de los habitantes del pueblo se convirtieran en numerosos susurros, extendiéndose a la velocidad de un incendio forestal. Ainz logró pensar por un segundo en lo que pudo haber causado tal reacción antes de que sus pensamientos fueran interrumpidos.

"¡Viva el Emperador!", gritó la multitud, que inmediatamente fue repetida por el resto: "¡Viva el Emperador! ¡Viva el Emperador!".

Nerón, que hasta entonces se movía tranquilamente por las calles sin ser visto, se limitó a sonreírle, tras lo cual ella dio un paso adelante y miró a los habitantes de la ciudad con un amplio gesto: "¡Viva el pueblo de Roma!".

Un segundo después de esto, la multitud de personas de Roma estalló en gritos; sin embargo, estos eran gritos de apoyo y, Ainz incluso podría decir, de adoración.

"Ella es muy popular entre la gente", la voz de Cu Chulainn le transmitió a Ainz el mismo pensamiento que también le había venido a la mente.

"Qué extraño", respondió la voz de Mashu, intentando hablar en voz baja, "escuché que él... Ella era popular, pero sus días terminaron en soledad..."

"La gloria no es eterna", dijo la tranquila voz de Medusa, pasando junto a Mashu en un segundo, haciendo suspirar a Ainz. Bueno, la gloria no es eterna, el propio Ainz lo sabía.

"Eres amado entre el pueblo", pero aun así dio un paso adelante hacia Nerón. En lugar de perseguir un significado específico con la conversación, simplemente intenta perder el tiempo antes de llegar al palacio.