Just Believe In Me

Chapter #1: El muerto

Uno,dos.

Inhala,exhala.

Uno,dos.

Inhala,exhala.

Ring-Ring

-¿Quien osa molestarme?

-John el magnifico- Salió del auricular y una sonrisa se formó en mis labios

-Pues"John el magnifico" tendrá un descuento del salario, por perturbar mis ejercicios.

-No le importa, porque John el magnífico, solo le quiere avisar que hay dos sujetos en la portería preguntando por su alteza.

-Esos dos sujetos ¿Tienen nombre?

-Ee..Creo que si, déjeme preguntar.- Pero que clase de portero me he ganado, pensé burlonamente.- Paul y Dean Jenkins

-No me suenan de nada... Tal vez si les veo

-Sera imposible

-¿Porque? Tan feos no pueden ser para que la cámara se vaya a romper, no lo hizo contigo- estaba segura que mi risa silenciosa se podía notar a través del auricular.

-Ha-Ha,que chistosa majestad, pero no, es que se han ido. Han dicho que ya volverían.

-Que extraño- dije confundida

-Bueno,fue lo mejor, uno de los tipos que había, estaba a punto de un coma etílico.- dijo críticamente.

-Humph...Mas extraño todavía. Bueno, en ese caso, si vuelven no los dejes pasar, estaré ocupada de todos modos.

Y le colgué sin esperar una respuesta, me divierto solo de imaginar su expresión, odia que le cierren primero y yo amo hacerlo.

Y continué con mis ejercicios durante un cuarto de hora más, y decidí que saldría a correr un rato, para finalizar. Bajé corriendo las escaleras, que eran muchas, y maldije el vivir en un décimo piso. Es una tortura.

Llegué al rellano del vestíbulo justo cuando John, interpretaba una canción popular de la radio con un plumero como micrófono. Me apoye contra la pared, intentando no reírme, a la espera de que se diera cuenta que lo observaba. Pero no pude aguantarme las ganas y estallé.

-Yoo...yo te.... Yo te prometo... Ir a uno de tus conciertos- Logré decir entre la risa.

Gritó en cuanto me escuchó, soltando el plumero que salió volando y cayó en su cabeza rubia. Me miro avergonzado como me reía sin fin, para luego pasar a enfadado, o, lo mas enfadado que puede estar una estrella del plumero de 12 años.

-No le veo la gracia, en lo absoluto, pude haber muerto de un ataque al corazón.

-Uiii,que Dios no deje que eso pasara- dije una vez que la risa había pasado- Bueno, John el magnifico con el plumero, me voy a correr.

-Ha-Ha,andas graciosilla hoy, verdad – Dijo a pesar de que su piel tomó un tono rojo de la vergüenza.

Pasé por su lado y le alboroté los rizos. Odiaba que le hiciera eso,porque según el dañaba todo el trabajo que había echo por la mañana, delante el espejo durante tres horas.

-Hey!Para! - mientras intentaba reorganizar su pelo -Antes de que te vayas, mi papa me dijo que te comunicara que mañana habrá  reunión de vecinos

-Puaj! Ya veremos- y salí del edificio

-Es obligatorio!!- gritó a la distancia, riéndose de mi desgracia

Odiaba esas innecesarias reuniones, donde buscaban un calendario del mes y marcaban los eventos que se realizarían, no le veía el sentido,porque, si un viernes me sale que quiero hacer una fiesta la hago, no tengo porque el mes anterior haber avisado a todos los vecinos sobre ella. Aunque el lado bueno de esas reuniones es que te puedes llevar a casa, las sobras que quedan de la comida que servían.