Capítulo 2.

714 66 20
                                    

Mis manos temblaban cuando me levanté del sofá y caminé hacia Harry, sintiéndome tan pequeño a comparación de su comportamiento presumido. Agaché mi cabeza cuando me encontré frente a él,  sintiéndome incómodo por como sus ojos escaneaban de arriba a abajo mi cuerpo, como si fuera alguna clase de escultura. Un escalofrío recorrió mi cuerpo cuando su mano tocó la mía, mi cara se enrojeció cuando sentí como rodeaba con sus brazos mi espalda, empujándome a su regazo. Tragué saliva y me quedé quieto, mis rodillas se enterraban es sus muslos.

"Mírame."

Él tomó con la yema de sus dedos mi barbilla, haciendo que levantara mi cabeza, mis ojos conocieron las orbes del monstruo. Saqué mis brazos de su agarre y los crucé sobre mi pecho, ellos eran mi única fuente de defensa. Puedo sentir que algo no va bien con este chico, él me asusta. Y al ver su sonrisa satisfecha, puedo decir que él lo sabe.

"Mamá se fue, así que no tienes donde huir. Así que pondré algunas reglas. Primero, ella no es tu mamá ¿Lo entiendes?"

Asentí y mordí mi labio, mi corazón sentía una pizca de dolor y rechazo.

"He dicho que si lo entiendes."

"S-Si."

"Segunda, mantente fuera de mi habitación. Si te veo un par de pasos cerca de mi habitación, te escucho, o te huelo, créeme, desearás nunca haber puesto un pie en esta casa."

El nudo en mi garganta creció cuando él puso su mano sobre mi pelo y acomodó mi flequillo con sus dedos delicadamente. No entiendo como él lograba sonreír tan amistosamente cuando todo lo que salía de su boca era tan cruel.

"Tercero, harás lo que te diga. Si te digo que traigas algo para mí, lo harás. Si quiero que te pierdas, lo mejor para ti sería que no te viera ni siquiera un poco. Tengo nada que ver contigo. Tú no eres mi hermano, tu sangre no es la misma que la mía y nunca lo será. Entiéndelo."

Sorbí mis mocos despacio mientras asentía con mi cabeza, sintiéndome repugnado por como Harry era capaz de ser tan cruel conmigo. Él puso la punta de sus pulgares sobre mis ojos, limpiando mis lágrimas. Harry seguía sonriendo incluso mientras yo lloraba.

"Cuarta, no toques mis cosas. No quiero tus tonterías de chica en ellas."

"P-Pero no soy u-una chica."

"¿Te he dicho que hables?" Jadeé al sentir su palma chocar nuevamente contra mi cara, mis manos rápidamente protegieron mi cara de él. Sacudí mi cabeza con desesperación para hacerlo feliz, aún cuando mis venas estaban hirviendo de rabia.

"Bien. Hemos llegado a la quinta regla. Mamá no te dará permiso para hacer cosas, yo lo haré. Tú serás mi responsabilidad hasta que me deshaga de ti. Ella puede que actúe  como si estuviera dispuesta a cuidarte, pero sé que seré yo quién te soportará. Ella trabaja todo el día así que ni siquiera te molestes en apegarte a ella, ni siquiera la verás ¿Entendido?"

Todo estaba muy bien para ser verdad.

"S-Si Harry."

"Sexta regla, no te pongas cómodo. No estarás aquí por mucho tiempo. Te irá mejor en la carrera si sigues esta regla, la más importante."

Demasiado bien.

"S-Sí."

"La séptima y última, no me desafíes a ser un cabrón. Cada vez que me quiten mis pertenencias a causa de ti, sólo será un día más en el que desearás no estar en esta tierra."

Desearía volver.

"¿Lo has entendido?"

"S-Si Harry." Mordí mi lengua tratando de silenciar el llanto, sintiéndome tan asustado de Harry, quien permanecía sentado mientras se divertía a costa mía. Los bellos de la parte de atrás de mi cuello se erizaron cuando él paró de sonreír y frunció el ceño. Él dejo de masajear mi espalda y puso su mano en mi cuello, llevando mi cara a centímetros de la suya.

Mi hermanastro guardián. (My step brother's keeper) Larry Stylinson. Traducción.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora