De gardenias y dementes

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Alex:
Debo reconocerlo, Isaac siempre me pone muy nervioso.
Salí de la ducha, ¿Qué me pondré? todo lo que tengo es feo y viejo, pero nunca me ha visto con ropa que no sea el uniforme, así que me puedo poner mi ropa de siempre. Encendí mi ipod y puse el nuevo álbum de Imagine Dragons, realmente estoy muy tenso.
Me paré frente al espejo y dejé caer la toalla que tenía amarrada a mis caderas ¿De verdad yo le gustaría a Isaac? Dios, ¿en que estoy pensando? Pero si alguna vez llegara a pasar ¿Qué pensaría de mi?, después de verme como soy, ¿Seguirá pensando que soy atractivo? Ví la hora, eran las 3:00, tenía que apresurarme. Me puse mi camiseta de Batman, mi camisa roja a cuadros, vaqueros negros y converse blancos. Me miré al espejo, cuando compré esta ropa pensé que me iba a ver "cool", pero ahora me doy cuenta que sólo me veo mas "uke" de lo que ya soy.
En ese momento sonó el timbre de la casa, corrí escaleras abajo con el corazón desbocado y la esperanza entre los dedos de ver la mirada de amanecer de Isaac, sin embargo, mi sorpresa fue contraria
- Hola - dijo Amador sonriendo mientras entraba y cerraba la puerta detrás de si- Hueles bien, ¿Esperas a alguien?
-¿Qué quieres, Amador?
-No hay necesidad de ser tan agresivos, solo necesito hacerte una pregunta- pasó a la cocina y empezó a inspeccionar el refrigerador, sacó una lata de refresco y me miró directamente
-la cual es...
-¿Hay alguien más en casa?
-No, pero Isaac no tarda en llegar
Se acercó a mi y yo me apoyé contra la pared, su barbilla rozaba con la mía y su aliento me hacía cosquillas en el cuello
-Algún día serás mío, Alex
-Tu sabes que eso nunca sabrá
-Y tu sabes que todo puede pasar, solo que en este momento le juras lealtad a Isaac, pero tarde o temprano desistirás.
Se alejó por el pasillo y cerró la puerta de la casa tras de si.
Isaac:
Abrí las puertas de mi casa y me quité los zapatos al entrar, a mamá nunca le gustó que hubiera polvo en los pisos, a pesar de que tenemos quien haga la limpieza, subí las escaleras y me encerré en mi cuarto, me desnudé y entré en el cuarto de baño, me miré en el espejo y pensé en Isis, comúnmente le mandaría un mensaje e iría a su casa con una flor de gardenia y disculparme y ella lo aceptaría, pero esto es diferente, ni yo me lo perdonaría, solo espero que no me tome rencor pero no espero que ella decida perdonarme.
Después del baño con agua fría me vestí, me gusta bastante mi ropa, así que casi siempre tengo problemas con que ponerme y me tardo bastante, por lo cual cuando tengo cosas importantes en las mañanas dejo los conjuntos hechos en las tardes.
Después de 15 min. en que el clima de mi habitación me arañaba el vientre desnudo mientras admiraba el clóset, decidí usar jeans negros y una camisa vino ( lo sé, que original ) y mis vans blancos. Bajé los peldaños a toda prisa, ya casi era hora
-¿A donde tan apurado, hermanito?
Genial, la persona que menos quería ver en mi vida entera
- A casa de un amigo, vamos a hace un trabajo
- Ya veo - bajó las escaleras lentamente hasta estar a mi altura, no tengo tiempo para esto - ¿Donde habrá quedado mu dulce hermanito que solía enterrarme en la arena cuando íbamos a la playa los fines de semana?
-Apestas a alcohol - lo cual era cierto - Y sabes que siempre odie la playa
Bajé las escaleras y al estar frente a la gigantesca puerta de mármol que papá mandó a pedir de Italia hace mucho tiempo, voltee y le dije en la cara
- Sabes que no todo es mi culpa, hace mas de 7 años que dejamos de ser una familia, para convertirnos en cinco extraños que lo único que saben uno del otro es que viven en la misma casa, y como lucían la última ves que nos vimos.
Alex:
Quince minutos después volvió a sonar el timbre, no me había movido de donde estaba, supongo que aún después de que la visita de Amador fue tan breve me afectó bastante, porque simplemente la información me pareció de pronto. Abrí la puerta, me alegró ver que esta vez era Isaac
-Hola- me saludó, con las manos sobre las rodillas y respirando en profundas bocanadas, pero sonriéndome, hice que pasara, subimos las escaleras y fuimos a mi cuarto
-¿Qué demonios te pasó?
- Me encontré con mi hermano en casa
- ¿Y luego...?
- Mi hermano y yo no nos veíamos en 6 meses, a pesar de que vivimos en la misma casa
-Tienes suerte de tener una familia- dije mientras miraba al suelo- Yo vivo con mi hermana y su esposo, nunca supe de mis padres y sinceramente no me interesa tanto saber que fue de ellos, porque la única persona que considero familia son ellos dos.
Pasamos la tarde viendo películas y capítulos de animes que prometimos reunirnos para ver hasta que oscureció, la oscuridad entraba al cuarto a través del ventanal de Alex la única luz en ese momento era de parte de la televisión.
Isaac:
Tomé el control de la televisión y la apagué, Alex me miró con una expresión de sorpresa, pude adivinarla a pesar de la oscuridad que reinaba en la habitación, acerqué mis labios a los suyos y le di un beso tierno.
-¿Pensé que querías ver las estrellas- me dijo Alex, con la cara ardiendo y sus ojos mas brillantes que nunca
- Antes pensaba que las estrellas era lo mas hermoso que una persona podría anhelar a tener- dije, mientras posé mi mano sobre su mejillas - pero contigo aquí, empiezo a darme cuenta que estaba profundamente equivocado, lo más hermoso que yo podría anhelar a tener eres tu.
Alex pegó sus labios contra los míos, y en la oscuridad de aquella habitación Alex descubriría al verdadero Isaac, y Isaac descubriría lo cegado que había estado tanto tiempo, de la idea estúpida idea que tenía de lo que era el amor, y que todo este tiempo en realidad sólo estuvo enamorado de la simple e idiota idea de estarlo.

Isaac & AlexDonde viven las historias. Descúbrelo ahora