I don't want you getting hurt ➳ Stydia OneShot / Stydia Fanfic

I don't want you getting hurt ➳ Part 2

-Ya sabes, aun no estamos exactamente seguros de lo que es, existe la gran posibilidad de que sea una cosa loca y psicópata con sed de sangre...- Lydia rodó sus ojos ligeramente, sus brillantes labios formando una pequeña sonrisa a causa de sus palabras. Stiles, el desconfiado, curioso, y siempre leal Stiles que tanto recordaba y extrañaba.

-Stiles.- Le advirtió.

-Simplemente no confío en él, ¿de acuerdo?. No lo conocemos. Ni a el ni a sus intenciones. Solo no creo que deberías pasar tanto tiempo con él. ¿Bien? Solo... porfavor. Deja que te lleve a casa.- Y Lydia, quien estaba a punto de decirle a Stiles lo desconciderado que sonaba pues Parrish les había ayudado mucho desde que había llegado a Beacon, lo miró a los ojos y un recuerdo fugaz se pasó por su cabeza. Su beso. Eso fue todo lo que vio mientras miraba fijamente a los ojos del chico, brillantes de una preocupación acaramelada. Ese tipo de preocupacion y amor que nunca había sentido antes de parte de cualquiera de los chicos con los que había estado. Ni Aiden. Ni Jackson. Mucho menos Parrish. Nunca antes había alguna vez mirado a los ojos de un chico y se había sentido a salvo, cuidada. Era algo que solo Stiles le podía entregar. Pero simplemente no era lo mismo. Después de su beso, ella pasó horas recordando la expresión exacta en el rostro del muchacho. ¿Y ahora? Era exactamente la misma, pero con un toqué de algo más. ¿Celos? Se mostraba tan ansioso porque Lydia no fuese con Parrish. ¿Pero por qué? Ella no entendía. Sabía que él se preocupaba por ella, pero estaba con Malia, y aunque eso no era un problema entre dos amigos que habían pasado por tanto juntos, ahora tenía a alguien más en quién enfocar su atención, pero de alguna manera, Lydia no podía dejar de sentir que estaba recibiendo un tipo especial de atención por parte de él... Y quería guardar el momento por siempre, sólo para ella.

-¿Lydia? ¿Estás bien?.- Le preguntó, devolciendola de golpe a la realidad, mientras la miraba con verdadera curiosidad.

-Sí. no, estoy bien. Vale... uhm, tienes razón. S-Sólo dame un segundo.- Con eso, Lydia acomodó su bolso sobre su hombro y se dirigió hacia el coche de Parrish. Stiles observó a la puerta, que había sido cerrada fuertemente por la pelirroja. Al mirar hacia abajo, observó el libro todavía entre sus manos, con notas post-it pegadas al final de capítulos específicos que eran tal vez de gran importancia, cada una tenía escrito algún pequeño dato extra que estaba seguro había escrito Lydia. Se asomó una leve sonrisa por sus labios al leer sus teorías. Puso el libro sobre la mesa auxiliar, algo que era capaz de hacer ahora que su padre estaba completamente al tanto de la locura que rodea a Beacon Hills y se giró hacia las escaleras, ya casi seguro de que Lydia no le había escuchado y había decidido salir con Parrish de todas maneras. Cuando de repente, sonó un delicado golpeteo en la puerta y Stiles se animó, caminando rapidamente hacia ella.

-Así que... Supongo que voy a necesitar ese paseo.- Lydia tímidamente le sonrió desde el escalón del porche, la patrulla de la policía ahora se deslizaba rápidamente por la carretera.