Mi idola. (H.S)

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Punto de vista de Tn:

Harry y yo habíamos quedado en que él vendría a buscarme a mi casa, para ir a la suya, ya que no podía rechazar la invitación de la madre de Harry, Anne y su hermana Gemma. Tenía ganas de conocerlas, sólo habíamos intercambiado un par de palabras el otro día en aquel restaurante por pura coincidencia.

Estoy nerviosa, temo bastante conocerlas. Conocer a las suegras siempre es incómodo y nada agradable, aunque Anne parece una persona muy maja no he llegado a conocerla todavía, salvo por lo que Harry aveces cuenta.

Me coloco correctamente el vestido rosa con encaje y vuelvo a mirar mi reflejo en el espejo. Mi pelo después de un buen rato con la plancha de pelo por fin esta liso, y me ha quedado bastante decente.

-¡Tn, Harry te está esperando en la puerta, dice que te des prisa! -grita mi madre, y después escucho a mi hermana pequeña haciendo un pequeño eco de mi madre.

Camino tan rápido como los tacones me permiten, cojo mi pequeño bolso y salgo de casa, encontrándome de cara con Harry.

-Estas preciosa, Tn -dice mirándome y sonríe, para después plasmar dulcemente sus labios en los mios.-Espero que tengas hambre mi madre ha hecho cena como para cuarenta personas.

Sonrió y me subo a su coche en el asiento de copiloto, mientras estamos de camino hacia casa de sus padre escucho la musica de la radio intentando calmar mis nervios que se propaga cada vez más rápido por mi cuerpo.

Normalmente no estaría tan nerviosa, pero entre todo estoy demasiado saturada de cosas, sobre mi relación con Harry y además dentro de dos días mi padre y mi hermano volverían de su viaje y tenia muchísimas ganas de volver a verlos a ambos, y junto a eso también sé que se acercaba el final de mi contrato con la discográfica, cosa que no sé si es bueno o malo.

Paso todo el camino hasta su casa con esos pensamientos repitiéndose en mi mente, ¿qué haré si la discográfica no me readmite? Pues no tengo ni la menor idea, supongo que pasar unos días hablando con todas las discográficas cercanas que no sé cuales son ni dónde están. Es bueno que el contrato se acabe, entonces podre estar bien con Harry, ser su novia tanto tiempo como duremos sin tener que preocuparme si alguien me dirá al día siguiente que tengo que dejarlo.

-Llegamos -murmura Harry, aparcando en coche en uno de los espacios desocupados frente a su casa.-Aún podemos dar marcha atrás si no te ves preparada, mi madre te preguntara de todo y mi hermana va más o menos por el mismo camino que mi madre.

-No pasa nada, y tú ya conoces a mi madre y mi hermana. Puedo con esto, no es como si me fueran a comer...

Abro la puerta del coche y salgo con cuidado de no colocar mal el tacón y caerme. Harry camina rápido hasta la puerta y pica al timbre un par de veces seguidas.

-¿Por qué has tocado el timbre si esta es tu casa? -le pregunto en un susurro, un tanto extrañada.

-Mi madre me ha hecho prometer que tocaría el timbre para que se preparen un poco antes de abrir, ya sabes, cosas de chicas y todo ese rollo -die sin mucho interés.

La puerta se abre en ese momento y sale Gemma, con un precioso vestido gris que le llega hasta las rodillas, y con unos hermosos zapatos de plataforma también grises, totalmente encantadora.

-Pasad, la cena ya está en la mesa, y mi madre no tardara nada en volver al comedor.-La sigo hasta una sala con una gran mesa cuadrada con una silla a cada lado, y una gran cazuela tapada en el centro rodeada de cuatro platos.-Tn sientate donde quieras, y mientras que mi madre se cambia de ropa, cuéntame algo de ti, ¿cómo es qué te hiciste famosa?

Pase un rato hablando con la hermana de Gemma, es una chica realmente encantadora, me pregunto todo tipo de cosas que le pasaban por la mente y no solo me decía lo que yo quería escuchar, como hacia la mayoría de la gente, ella me respondía con toda la sinceridad del mundo lo que ella pensaba de cada una de mis respuestas a sus preguntas, lo que pasaba es que estábamos dejando a Harry un poquito de lado.

Anne salio con un estupendo vestido lila y unos zapatos a juego, se sentó al lado de Gemma y se unió a la conversación que teníamos Gemma y yo. Después de un rato hablando, Anne destapó la cazuela y sirvió para cada uno en un plato. La comida la verdad es que estaba riquisima, comencé a comer y eche una rápida mirada a Harry, que a su vez estaba mirándome con una sonrisa muy amplia que hacia que sus lindos hoyuelos aparecieran en sus mejillas, haciendo que se viera adorable, me sentía como si de alguna manera hubiera pasado algún tipo de prueba secreta de Harry.

-Bueno, Tn, ¿tú quieres a Harry, verdad? -casi me atraganto con la comida cuando Anne pregunto eso, como si no fuera más que otra de las muchas preguntas que me había hecho antes cuando estábamos hablando las tres.

-Por supuesto que quiero a Harry, si no le quisiera no habría aceptado ser su novia, es un chico muy especial -contesto, mirando el plato, no me atrevo a mirar a Harry en este momento, mucho menos después de decir eso.

Después de esa pregunta, Anne vuelve a hacerme preguntas sobre mi vida como cantante y los beneficios y los contras de esa profesión. La verdad es que, tanto Anne como Gemma, son encantadoras y muy simpáticas.

Cuando llega la hora de irse, me despido de ellas con un gran abrazo, y salgo caminando hasta el coche de Harry, con Harry caminando detrás de mi.

Conduce hasta mi casa en silencio, pero cuando voy a salir para ir a mi casa se acerca y me da un abrazo y un beso.

-Yo también te quiero -dice, antes de girarse y volver a su coche.