Mi príncipe Link y tú

Inseguridad

Una luz segó la vista de Hyung, se preguntaba donde demonios estaba. La respuesta era simple, una bodega.

-¡___! ¡Ya despertó! -

No pudo reconocer con exactitud la voz, ni siquiera el rostro por que la luz no llegaba hasta donde estaba aquel chico.

___ al escuchar el llamado de Yunho, miró a Hyunckel quien asintió. Ambos caminaron hacia dentro de la bodega, el primero en entrar fue Hyunckel seguido de ___.

-¿Q..Quienes son? -

-Creo que la respuesta es sencilla ¿No? - dijo Yunho.

Al no poder ver sus rostros, Hyung se llenaba de más preguntas.

-¡¿Quién demonios son?! -

___ rió sin gracia.

-¿Encerio no lo sabes? Al parecer no te dejaron más idiota con ese golpe -

-¿_..___? -

-Si, felicidades -dijo con sarcasmo.

-Hermosa, si querías tenerme solo debías pedirlo -dijo más tranquilo.

-¿Encerio creés que ella te quiere? -dijo Yunho con burla.

-Pues claro -

___ rió con burla, le era gracioso ver a Hyung, pensar que ella lo quería ó que había caído ante sus "encantos" .

Caminó lentamente y se detuvo cuando la luz logró iluminar su rostro, ahora tenía una expresión seria con un toque de fastidio por tener que interactuar con él.

-La mento tener que decírtelo ó bueno no, no lo lamento. Es un placer para mí destruir tus ilusiones. Yo jamás me fijaría en tí, ni por error, te lo dije un millón de veces -

-Aún no me rindo, hermosa. Y esto me hace pensar lo contrario -sonrió con picardía.

-Que asco -dijo con una expresión de repulsión -no te traje aquí para eso -

-Entonces ¿Para qué? -

Lo sabía, pero le gustó mantener la ilusión de que ella lo quería de una manera obsesiva y por eso lo tenía así. Pobre enfermo.

Pero como era para otra cosa, no les iba a decir todo solo por que ella se lo pidiera. Tampoco era tan soplón, al menos no si iba en contra de las órdenes de Linnet.

Era su fiel lame botas y pues ahora que no podía conseguir a ___ para sus fantasías, solo le quedaba seguir las órdenes de Linnet como un fiel perro.

-¿Qué planean tú y esa desgraciada? -

-Oye más respeto, esa hermosa boquita no debería decir tales cosas -

-Mantén la boca cerrada si no vas a decir lo que quiero oir -

-Oh vamos, hermosa. Te encanta escucharme -

-Responde mi pregunta ó cállate -

-¿Por qué debería? -

-Hazlo ó te haré suplicar por tu muerte -

-Lo haré... si aceptas una noche conmigo -

Quería ir y cortarle lo más preciado. No sólo ella quería hacer eso, sino Hyunckel también ¿Cómo podía ser tan descarado en pedirle eso a su hermanita?

A los tres les dió tanto asco escuchar eso que ya querían cortarle la lengua pero nesetaban escuchar todo el plan completo para después ir con el rey.

-Eres un... -suspiró para no perder el control -ya dime lo que nesecito saber -

-Ya te dije, acepta mi propuesta y te lo diré -