𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝟭𝟲 | 𝗰𝗼𝗿𝗼𝗻𝗮 𝗱𝗲 𝗳𝗹𝗼𝗿𝗲𝘀

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Rebecca se encontraba en su habitación jugando con su balón de fútbol

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Rebecca se encontraba en su habitación jugando con su balón de fútbol.

Subió el volumen de la música que escuchaba.

Bad de Michael Jackson.

—¡Rebecca bájale el volumen! — gritó su madre desde la planta de abajo

Si embargo, gracias a la música, Rebecca no le había escuchado.

Siguió disfrutando de la canción hasta que entraron a su habitación sin tocar antes.

Su madre apagó la música.

—¡Ehh! — se quejó — venía la mejor parte

—te dije que le bajaras el volumen — su madre cruzó los brazos

—no te escuché

—ya veo — miró la habitación de su hija — Rebecca, esta parece la habitación de un muchacho

La chica rodó los ojos.

—no exageres — respondió — según tu, ¿cómo debe ser mi habitación?

—rosa, con cortinas blancas y con blondas — empezó a describir — una cama con sábanas de seda y peluches

—ahh, peluches si tengo — sonrió — lo demás que describiste es una total mierda

—Rebecca, el lenguaje — la regaño

—vale, lo siento — se disculpó — pero no puedes entrar a mi habitación sin tocar, apagar mi música y luego criticar mi habitación

—deja de patear ese estupido balón y ponte a estudiar — le cambio el tema

—no es estupido — habló enojada — te recuerdo que papá me regaló ese balón

—si, y no sabes cuánto odio eso

Rebecca la miro dolida.

—¿por qué me odias tanto? — se atrevió a hacerle la pregunta que la atormentaba desde que su padre falleció

—yo no te odio — respondió — eres mi hija

—ohh, si, claro — habló sarcásticamente — y por eso siempre te dedicas a hacer mi vida un infierno

Su madre la miró en silencio como si tratase de no pensar en el.

—¿qué? ¿Te quedarás callada? — se acercó — vamos, respóndeme — sintió un nudo en su garganta

Natalie no respondió.

—eres una cobarde — dijo mientras salía de su habitación

—¡Rebecca! — la llamo — ¡Rebecca, vuelve aquí ahora mismo!

La chica hizo caso omiso a los llamado de su madre y salió de la casa.

Natalie tomó asiento en la cama de su hija y suspiró.

𝗦𝗛𝗢𝗨𝗟𝗗 𝗜 𝗦𝗧𝗔𝗬 𝗢𝗥 𝗦𝗛𝗢𝗨𝗟𝗗 𝗜 𝗚𝗢 | 𝗘𝗱𝗱𝗶𝗲 𝗞𝗮𝘀𝗽𝗯𝗿𝗮𝗸Donde viven las historias. Descúbrelo ahora