Capítulo 43: Latidos de ilusión.

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Previamente:

Unos días luego de que la hechicera Muria se uniera al viaje de Kino y Kiri con el fin de llegar a Equios, se encontraron con una mujer llamada Harvet que les impidió el paso.

Sin saber bien sus intenciones ni quien era exactamente, la mujer arremetió contra ellos y luego de una desigualada pelea, derrotó a Muria sin problemas. Acabó con Kiri en un instante y al verse acorralado, Kino decidió usar sus habilidades por primera vez desde que había renacido.

Luego de una larga pelea que duro tres días y tres noches tanto contra ella como con el mismo, Kino logró dejarla sin fuerzas, sin embargo, antes de caer la mujer ¿le propuso... matrimonio? ¿Eh?

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[¡Oye! ¡¿No te gustaría casarte conmigo?!]

Sentada sobre aquel campo de batalla y rodeada de las partes del cuerpo que le había cortado Kino. Harvet, la guerrera, exclamó esta pregunta con gran expectativa mientras hacia una sonrisa tan inocente como la de una niña de primaria.

[Ahhh... yo... bueno...]

Kino no estaba seguro de que responder. Estaba en shock, tanto por el repentino curso de la situación como la pregunta en sí. Las relaciones y él no eran un tema el cual le gustaba tratar, además, no estaba seguro si era el momento para lidiar con algo así.

Por otro lado, Muria y Kiri estaban igual de sorprendidas. Siendo personas que solían pensar antes de actuar; de todo lo que podría haber dicho la guerrera, aquello era algo que ni por un segundo se les podría haber pasado por la cabeza.

Muria trataba de hallarle alguna razón, pero claramente no podía leer mentes. ¿Qué la condujo a pedir eso? ¿Qué tipo de vida te lleva a preguntar eso después de casi matar a tu oponente? ¿Era este tipo de pensamientos el origen de su fuerza? ¿Qué era exactamente ser fuerte?

La hechicera recordó como una vez su abuelo le enseño el hechizo más poderoso que poseía y cómo este había nacido más de un impulso que por puro conocimiento.

Eran enormes pilares de incalculable belleza y que tenían el poder para controlar todo un País. Aquello se volvió su ideal y a pesar de todo lo que había conseguido hasta ahora, sabía que aún estaba lejos de igualarlo.

[¿De verdad el deseo es más fuerte que el conocimiento? Que ridiculez...] —comentó mientras salía del trance.

Kino seguía sin poder responder a la petición de Harvet y en un intento de encontrar algunas palabras que decir; consulto con la voz que poseía en su cabeza, pero esta tampoco tenía idea de que responder.

[Yo... bueno... me siento... alagado, supongo, pero...]

[¡¿QUÉ?! ¡NO TE ESCUCHO!] —exclamó Harvet al ver como Kino murmuraba.

[Que yo... bueno...]

[¡Vamos! ¡Solo es una cosa y ya! Case... mo...nos...]

PLAF

[¿Eh?]

La guerrera empezó a cabecear luego de dar aquel gritó y antes de darse cuenta, perdió el conocimiento y su cuerpo cayó hacia el piso.

Los tres días en los que había peleado contra Kino sin parar finalmente le habían pasado factura y su cuerpo exhausto no pudo mantenerse en pie ni un segundo más.

Si bien poseía habilidades y una fuerza muy superior a la de un humano normal, seguía poseyendo limites biológicos que le eran imposibles de superar; aún si ella se negaba a reconocerlos.

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⏰ Última actualización: Feb 12 ⏰

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