Amor de locos (Terminada-Editando)

CAPÍTULO XXIII: Paliza

~RUTH~

Ese maldito de Bieber, no lo soportaba, ese niñito mimado, ¿quién se creía para llamarme gallina? Ok, se que era infantil por mi parte enfadarme por eso, pero desde chica he odiado que me llamasen gallina cuando no lo soy. Me da igual subirme a su moto la verdad, al principio simplemente estaba bromeando, pero él maldito de Bieber tuvo que llamarme gallina... LO ODIO. Sí, le odio y le quiero a la vez. Tiene momentos en los que me hace sentir la persona mas feliz del mundo y tiene otras en las que desearía tener una pistola en la mano para cargarmelo.

-¡Ruth! ¡Ruth, espera por favor!

Seguí caminando pero esta vez mas deprisa al escuchar los pasos de Bieber más cerca de los míos.

Su mano cogió mi brazo, hizo presión para que parase pero sin hacerme daño. Me gire y le miré a esos malditos ojos miel que me derretian por dentro.

- Lo siento, no debí llamarte gallina. Pero ¿que más te da subirte? no va a pasar nada, lo prometo.- solté una carcajada y Bieber me miró confuso.

- Jus... a mí me encanta ir en moto, sólo bromeaba. Pero como siempre eres tan capullo que metes la pata y me insultas.

- Tú lo haces siempre.- me dijo serio.

- Está en mi derecho.- le dije como si nada.

- ¿Qué derecho? No existe ningún derecho.

- Jus, Jus, Jus que mal te veo.- apreto su mandibula.

-----FLASHBACK----

-¡De que coño vas!- La mano de Lucas se estrello en mi pómulo.- Tu harás lo que yo diga, ¿está claro?

-Q-quemas q-quieres de mí... ya ya me has usado, te has llevado mi dignidad, ¿qué más quieres?- me levanté del suelo y le miré. Lucas se acercó a mí rápidamente y me pegó contra la pared.

- Mira zorra- temble al oír su tono de voz.- Nadie en esté mundo va a quererte. Yo te estoy dando la oportunidad de quedarte conmigo y a ¿así me lo agradeces?- agarró con fuerza mis manos y las puso encima de mi cabeza.- ahora vas a abrir tus piernas para mí, por que voy a follarte.

- Tú... nunca... me has... me has follado...- las lágrimas no me permitían hablar, tenía miedo, quería gritar, lo intenté pero mi voz no salía.

Noté como bruscamente me embestía. El dolor era insoportable, lloraba, grite para que alguien me ayudará, pero nadie venía, nadie estaba conmigo.

-----FIN DEL FLASHBACK----

- Ruth...- seco con sus llemas mis mejillas.- Perdóname no era mi intención hacerte llorar. Por favor perdóname.- me abrazo con fuerza y lloré, lloré con fuerza. Odiaba mi pasado, ese maldito pasado que siempre terminaba volviendo. Justin beso mi frente, de nuevo me sentía protegida, querida, amada, pero yo no estaba hecha para estar con él, no alguien a quién con quince años le fue robada la dignidad. Me separé de él un poco.

- Jus... Perdóname tú, creeme cuando te digo que no soy digna de tenerte.- comenzó a negar con la cabeza repetidamente. Fue a hablar, puse mis dedos en sus labios para callarle.- Jus te quiero, te quiero muchísimo, se que nunca te lo digo y perdóname por eso. Soy muy estúpida. Jus no podemos seguir, no cuando...

- Por que ese cabrón te hiciera eso no tienes por que hacerme a mi esto.- cogió mi mano con delicadeza.- no te he pedido nada descabellado aún, bueno sí que lo voy a hacer- le miré confusa.- Ese Tío no está ya muerto por que tu me has pedido que pasará de él. ¿Pero sabes que? Ahora si que me lo voy a cargar, por dos motivos. Uno, mi chica llora derrepente por que recuerda las cosas que su ex le hizo y dos porqué me callo mal desde que le vi.

- Justin, no vas a hacerlo.- le amenace y él simplemente alzó una ceja.- Por favor.

- Ok.

~JUSTIN~

Después de nuestra discusión deje a Ruth en casa. ¡Justin eres un gilipollas! Vuelves de estar cinco días sin verla y lo primero que se te ocurre es discutir, en vede decirle "Pequeña, quiero estar enserio contigo. Ruth quiero que seas mi novia" Soy un gilipollas. El rostro lleno de lágrimas de mi chica vuelve a mi mente. Juró que a ese capullo lo mato. Paré la moto y saqué mi móvil del bolsillo. Un pitido, dos...

- Hey, bro! ¿Estás ya aquí?

- Si Ryan, oye necesito que me hagas un pequeño favor.

-¿Qué pasa tío? ¿Algún problemilla?- si tu supieras...

-No, tranquilo. Sólo quería visitar a tu primo, él me dio el otro día un consejo y quería agradecerselo.

Subí las escaleras corriendo la ira recorría todo mi cuerpo. Llegué por fin al 3-B, toqué el timbre varias veces hasta que ese mal nacido me abrió.

- Hey Justin! ¿Cómo que estás por aquí?- Mi puño se estrello en su cara.

~RUTH~

Terminé de leer "No sonrías que me enamoro", ojalá mi historia sea como la de Raúl y Valeria, bueno, pero sin las terceras personas claro está. Dejé el libro en mi mesita de noche y cogí el móvil. Justin me había escrito varias veces al WhatsApp.

-Mi capullo: Ruth!

Eoooooo

No pases de mi!!

Perdón por lo de está mañana

Venga no seas así, hablameeee!!!! :'(

te quiero!!

pequeña andas despierta?

-Yo: queva

- Mi capullo: Porqué no me contestabas?? :$

- Yo: Perdón :p, pero estaba leyendo y he pasado del móvil.

Una llamada me estaba llegando, era de un número desconocido pero aún así me sonaba y mucho. Lo cogí.

-¿Sí?- pregunté dudosa.

- ¿Borrastes mi número?- mi corazón se paralizo. ¿Cómo tenía mu número nuevo?- Veo que Justin anda loquito por ti, ¿sabes que a hecho?

-Q-que...

- Ha venido a mi casa- ¿Qué había hecho qué?- y por su culpa acabo de salir del hospital, me ha partido un brazo y tengo una costilla rota. No voy a demandarle cariño, pero tu hermanito sufrirá las consecuencias.

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