Amor de locos (Terminada-Editando)

CAPÍTULO VI: Despertar con el enemigo a tu lado.

holaaa, bueno solo deciros que voy a hacer un cap. especialmente para las belibers, pero para eso necesito que me ayudais y me deis ideas.

Bueno disfrutar con este nuevo cap.

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~Ruth~

El día amaneció oscuro y frío. Hoy por desgracia volvería a ver al desgraciado de Bieber. Sigo sin creerme como tantas chicas pueden ser fans, osea Belibers. Total, se nota que realmente no le conocen.

Estire los brazos con fuerza, me daba mucha pereza salir de la cama. El móvil me vibro, Kevin venía por mi en diez minutos, al parecer hoy grabariamos mi canción.

Me destape poquito a poco. El frío recorrio mi cuerpo haciendo que mis dientes comenzarán a castañear. Corriendo eche el hedredon por encima y cerre los ojos.

Toc, Toc, Toc.

Escuche como abrían la puerta y puede oir un agudo gruñido. Era obvia que era Kristen. Me destapo tiro el hedredon al suelo para evitar que lo cogiese.

- Levanta, Kevin y Justin están de camino.- me incorporé al oir ese maldito nombre.Tape mi cara con la almohada dejando que un grito de rabia contenida escapase.

Quité la almohada de mi rostro y vi la sonrisa burlona de Kristen. Se le notaba que veía como sufría con esto.

Me arrastre hasta el borde de mi cama. Los dedos de mis pies tocaron el frío mármol haciendome estremecer. ¡Odio que hiciese tanto frío! Conseguí incorporarme en la cama. Vi la sonrisa triunfal en el rostro de Kristen y me volví a tumbar. No pensaba darle el gusto. Volvió a gruñir y salió de mi habitación dando un fuerte portazo.

Cogí el hedredon del suelo y me lo puse por encima. A los segundos mi cuerpo consiguió tener la temperatura exacta para poder seguir durmiendo. Mis párpados comenzaron a pesarme cada vez más. Terminé durmiendome de nuevo.

~JUSTIN~

Kevin vino a recogerme al parecer hoy iríamos al estudio para grabar la canción. Apenas había podido dormir, ver a Ruth llorando me desarmo por completo y se que le debía una disculpa, que no dudaba en darsela en cuanto le viese.

El coche paró en la puerta de la casa de Ruth. Bajamos y llegamos a la puerta. Los nervios me estaban matando, no lo comprendía pero desde anoche sentía que la extrañaba, que la necesitaba tener cerca para estar mas tranquilo. La puerta se abrio y Kristen nos dedico una encantadora sonrisa.

- Buenos días Kevin- le dio dos besos en las mejillas y luego volvió sus ojos a mí.- ¿Qué tal estas Justin?- repitió el acto que hizo con Kevin.

-Muy bien Señora.

-Por favor, llamame Kristen.- le sonrei. Nos hizo pasar al salón.

- Esperar aquí, Ruth aún sigue acostada, llevo como una hora intentando sacarla de la cama.

- Dejemelo a mí.- me levanté del sillón.- Veras como en menos de diez minutos está aquí abajo.

Kristen me indico donde estaba su habitación. Subí las escaleras y seguí las instrucciones de Kristen. Llegué a una puerta blanca, la golpee tres veces y al no recibir respuestas decidí entrar.

Ruth estaba totalmente dormida. Su boca estaba entre abierta y dos mechones caían por su rostro. ¿Porqué tenía que ser jodidamente hermosa?.

Me tumbe a su lado, pase mis manos al rededor de su delgada cintura. Ni se inmuto. Acerque mi boca a su oreja. El olor de su cabello a fresas volvió a invadir mis fosas nasales. Cerre los ojos e inspire profundamente. Una sonrisa tonta se escapó de mi boca. Apolle mi codo en la cama para incorporarme y acceder mas a su hermoso rostro. Aparte con cuidado de no despertarle los dos mechones que le caían y los pasé por detras de su oreja. Hizo un ruidito y la miré de nuevo. Continuaba profundamente dormida.

- Cariño- se encogió y pego su pequeño cuerpo al mío. Haciendo que encajaran a la perfección.- Tienes que despertarte ya.

- Cinco minutos, por favor.- aguante la risa al oir su voz ronca debido al sueño que tenía.

Baje mi cara hasta su cuello. Su maldito cuello me suplicaba que lo saborease. Deje un beso corto. Uns increíble sonrisa se le dibujo. Volví a besarle muy lentamente el cuello. Note como una pequeña carga eléctrica me recorria el cuerpo entero. Me separé de su cuello por falta de aire. Levanté la mirada y vi sus ojos clavados en los míos. No sabría decir si estaba enfadada o no.

-¿Que haces Bieber?- se incorporó y se cruzo de brazos. No fue borde, de hecho su voz sonó ¿dulce? Si, si, su voz era dulce. Mordió su labio inferior intentado que no se le escapase la sonrisa que prometía salir.

- Pedirte disculpas por mi comportamiento de ayer.- Bajo la mirada y desvio sus ojos de mis. La notaba tensa y movía los dedos de las manos nerviosamente.- Me pase demasiado. No debí de echarte en cara los actos que cometistes.

- Justin... por favor para.- me costó escucharla, se le notaba que ese tema le afectaba. Me pegue a ella, fui a pasar mi brazo por sus hombros pero su pequeña y delgada mano. La miré confuso.- Te perdono- le sonreí.- Pero eso no signica que lo pase por alto.- Se levantó de la cama y volvió su vista a mí.- Anoche comenzaste una guerra.

-¿Una guerra?- le sonreí de lado y ella me contesto con una mueca.-

- Bieber sal ya de mi habitación.- su tono autoritario y amenazante volvió. Señaló la puerta y frunció el ceño.

~RUTH~

Se levantó vacilante y se acerco a mi. Pego su cuerpo al mío sólo los escasos centímetros nos separaban. El corazón se me aceleró. Y noté un extraño cosquilleo en el estómago. Puse mi mano por su duro pecho. Justin bajo su mirada y clavo sus ojos miel en mis manos. Volvió a dedicarme esa tonta sonrisa. Me gire y ande hacia mi armario para vestirme. Cogí unos lengins negros una camisa, un chaleco verde de cacería y las vans. Cuando me gire Justin estaba sentado en mi cama observándome.

- Justin te dije que te largaras de mi cuarto.

- ¡Ah! Si es por mi no te cortes.- le puse mala cara.- Pero si tanto te molesta.- se levantó de la cama.- Te dejo sola.

-¡Bieber que te largues de una puta vez!- me tenía totalmente desesperada, me irritaba.

Una vez conseguido que el estúpido de Justin me dejase tranquila entre en la ducha. Deje que el agua caliente me relajase. Recordé los besos calidos y dulces que Justin dejo por mi cuello. Estaba confusa, Justin me hizo sentir extraña.Feliz.

Baje las escaleras. Kevin, Kristen y Justin estaban en el salón. Hablaban de algo que al parecer era gracioso.

Entré en el salón y los tres volvieron su vista hacia mí. Yo les devolví una mirada indiferente.

Kevin y Justin se despidieron de Kristen y subimos en el coche.

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Hola de nuevo, espero vuestras ideas jajajaja y ya saben comentar y votar.

Un beso y gracias por leer.