El Fuego De La Muerte (Leo Valdez y Tú)

Prólogo

¿Te puedes imaginar que fueras mitad dios? Yo supongo que no, creo que si estas leyendo esto podrás saber lo que se siente ser mitad dios, claro que yo siempre tuve mis sospechas de que no era una niña normal, pensaba que era una tipo superhéroe, hasta que llego un chico explicandome lo que soy, una semidiosa, aunque yo no tengo un problema que la mayoría los tiene, yo no tengo dislexia. Soy de las chicas que les encanta los videojuegos. Los chicos y chicas de la high school no me juntan porque piensan que soy muy rara y friki. Cuando hay trabajos en equipo nunca me dejan hacer nada por lo que agradezco, ponen mi nombre en los trabajos. Mis calificaciones no son ni buenas ni malas; son regulares. No me quejo, mi hermano menor que tiene 14 tiene mucho mejor sus calificaciones, a el siempre le han llegado amigos. La verdad es que no se el porque nunca me quieren, soy una gran persona.

Desde el día que un chico con pelo negro y ojos hermosamente verdes como el mar. Me contó sobre lo que es el ser mitad dios. Que aunque la vida de un semidios no es tranquila puedes ser feliz. Me dijo que talves mi madre o padre no es mi padre o madre. Yo sospecho que mi padre no es mi padre. Lo quiero y aprecio demasiado pero siento que el no es mi padre. Agradezco que me haya criado pero aún así es la verdad. Cuando el chico de ojos azules me acompañó hasta la casa mis padres hablaron con la verdad.

-Como quisiera que este día no llegara-dijo mi madre. -Hubo un día que tuve que salir, yo tenía que ir a ver a tu abuela, tu padre y yo estabamos comprometidos. El día que llegué con tu abuela conocí a un hombre encantador, con los mismos gustos que yo, salimos por días entonces llegó ese día que no me resistía más y ya sabes lo que paso. En cuanto me dijo que era un dios y que ya no podía estar conmigo me sentí sucia, pues había engañando a tu padre. En cuanto volví aquí le conté a tu padre lo que pasó. Tu padre me entendió, antes de que nacieras nos casamos, ya teníamos esa fecha. Cuando naciste supimos que tendrías un potencial enorme. Quisimos ocultarlo pero fue nuestra equivocación-

-Lamentamos el haberlo ocultado hija- dijo mi padre.

-No se disculpen, lo hacían para protegerme- les tomé de las manos -pero ahora tengo que cumplir con mi destino, en realidad les agradezco todo- les abracé. -Iré a arreglar mis cosas- dije viendo a mi nuevo amigo.

-Si les hace sentir mejor les mandaremos un mensaje iris cuando lleguemos al campamento- dijo Percy cuando salí de mi habitación con una mochila.

-Estaría muy bien, joven Percy, cuide de ella con su vida- le dijo mi padre.

-No se preocupe señor que estará a salvo en el campamento- dijo amable.-y no este nervioso que al final del verano puede volver con ustedes- les sonrió.

-Cuidate mucho-me dijo mi madre dándome un fuerte abrazo en la puerta.

-claro que si madre- salí del apartamento y del edificio.

Nos paramos justo enfrente de un auto negro y nos subimos.

-Listo Argos, vámonos- le dijo Percy a un hombre que cuando parpadee por segunda vez veo a una persona con ojos en todos lados-

-Percy... ¿Argos tiene ojos por todos lados?- pregunté un tanto asustada.

El rió leve.

-El es así, no te preocupes te asustaras más al llegar-

Me voltee nerviosa, y pensaba, ¿por qué dijo que me asustaria más al llegar? ¿qué esta loco? Pero algo decía en mi que me tenía que tranquilizar puesto que el me había dicho que todo, absolutamente todo de la mitología era verdad; lo que me pregunto yo misma es como es que no me atacaran monstruos si siempre tenía una cosola de videojuegos. En este momento, en mi mochila, tengo mi Nintendo 3ds, es algo que en realidad me hace pensar en quien es mi padre.

-¿Cómo es el campamento?- le pregunté ansiosa por llegar

-Es muy hermoso, te encantará- dijo muy seguro.

-Muy bien, ¿quién crees que sea mi padre?-

-Bueno... yo quisiera tener una hermanita, pero dudo que lo seas, eres más este... no se... seria?-

-Osea que porque soy seria no crees que sea tu hermana- le dije indignada.

-No, no, no quise decir eso- dijo corrigiendo.

-Pues es lo que dijiste- le dije viendole mal.

Suspiró vencido.

-Lo siento- dijo.

-Esta bien, te perdono hijo mio- dije como padre de iglesia.

-Ves mucha tele-

-Bueno pues que esperabas de una chica que no tiene amigos- dije un tanto triste.

-Pues espero que cambie eso- me guiño.

Paramos a un lado de un bosque lo que se me hizo extraño y bajamos. Caminamos por el bosque hasta llegar a un arco con letrqs griegas y al lado un Dragon enrolado a un pino con un manto con brillo dorado. Ahora veo el porque dijo Percy que me asustaria, pues al ver al Dragon grité de horror.

-Tranquila, cuida tu nuevo hogar- me sonrió.

Entramos y sentí que travieso algo y veo que lo que veía hace poco tiene más cosas y no es lo que se veía. Dije muchos veía, que rara soy. Llegamos a una gran casa de color azul, que me dijo Percy que se llamaba Casa Grande, y creó que le hace honor. Afuera de ella había un hombre mitad caballo, un Centauro creo.

-Bien Quirón aquí esta la chica- dijo sonriente.

-Hola, soy Quirón, el director de actividades del campamento- me dio la mano el gran hombre. -¿cómo te llamas?-

-_________ Sandler- le sonreí al centauro.

-Srta. Sandler, Percy le mostrara el campamento- dijo sonriente.

-Ok, Quirón- le dijo Percy sonriendo.

-Me avisas si la reclaman- gritó Quirón atras de nosotros.

Caminamos por todo el lugar que me dolían los pies de tanto caminar.

-Y por último el búnker de Leo- dijo alegre.

-Hay no!, más caminar?-

-Hay vamos te va a agradar el chico- dijo jalandome para adentrarnos en el bosque.

Caminamos hasta llegar a un lugar con un fuerte de metal y unas grandes puertas. Percy tocó la puerta y abrió un chico sonriendo de oreja a oreja, parece the joker, pero se veía muy agradable. Me mostró su búnker, que al parecer se llama búnker 9. También me mostró el Argo II que tiene la cabeza de un Dragon en el frente.

-Y esta es la más grande invención del grande Leo- me guiño y reí leve. Pero desapareció su sonrisa y se inclinó en forma de ¿alabacion? Al igual que Percy.

-Eso no me lo esperaba- dijo al volverse erguido.

-¿Qué cosa?- pregunté confundida.

-Eres hija de Hades-

-Noooo! ¿enserio?- dije incrédula.

-Una sombritaa!- corrió a abrazarme Leo.

-Espera... soy hija del dios del inframundo?- dije sin aun creerlo y apartandome de Leo.

-Siii!- dijo Percy.

-Wow... y tengo hermanos?-

-Si, uno se llama Nico y la otra Hazel pero ella esta en el campamento romano- dijo Leo

-Esto es genial!, soy poderosa bwaajajajaja-

-Se le subieron los humos- dijo divertido Leo

-Hay cállate- dije yo -y? Vamos quiero conocer a mi hermano- dije sacandonos a los tres.

-Leo, llevala a la cabaña yo le dire a Quirón- dijo corriendo.

Llegamos a la cabaña de Hades y Leo tocó.

-¿Qué quieres Valdez?- dijo un chico que parece haber estado durmiendo.

-¿Qué forma de recibir huesitos?- dijo divertido.

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