Alhama de Aragón

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-Hola, ¿qué tal?-Dijeron mis tios.
-Bien. -Contestamos Gabriel y yo. Empezaron a parlar mucho; pero después de un rato ví a Minchina, la gata de mis tíos y de mi prima. Empecé a jugar con la gata y con mi hermano Gabriel. Nos lo pasamos muy bien. Creo que pasó una hora, y aún había que recoger, así que, nos fuimos a casa. Estaba guarrísima: llena de arañas, telarañas y algún bicho muerto. Tuve que hacer hasta mi cama ponerle las pastillas y todo ese rollo, hasta hice la de mi hermano.
Era la hora de comer y nos fuimos a casa de mis tíos. Yo tenía muchas ganas, para estar con la gata, Minchina. Lo malo era la comida: porque lleva cebolla, caracoles, y otras cosas que no me gustan. Pero me daba igual, con tal de estar con Minchina.
Luego, quedamos para ir al pantano (que es lo que más me gusta del pueblo, aparte del lago).
Pero fuimos todos: incluido mis otros tíos, mis otros primos y unos amigos de mis tíos, es decir, toda la familia.
Pero, me lo pasaré bien, porque tengo en la caña de pescar y mis aletas y así me divierto. Preparé la caña y eche el maíz al agua, pero ahora tocaba esperar.
Después de esperar mucho noté un tirón y un movimiento en el agua saque la caña (que me costó) y era ...una carpa ENANA.
Me daba rabia, pero por lo menos había pescado algo.
Pero yo soy de los pescadores, que siempre devuelven el pez al agua.
Después de devolver el pez al agua, me metí al agua.Pasó un rato y derepente vinieron unos amigos de mi padre y empezaron a contarse historias en plan así:
-Pues hace unos años, un chaval se tiró desde la colina y se murió, porque cayó mal y luego la empresa se abrió y se lo tragó. -Dijo mi tía seria.
-Si, y el Luis se ahogó por donde está la isla, que estaba al lado de la presa, pero a ese lo salvamos.
-Dijo mi tío muy serio.
Y así todo el rato, yo estaba aún en el agua, y está traumatizado ¿qué porque?, porque de repente noté algo en las piernas. Giré la cabeza, pero no veía nada, yo pensaba que sería una alga. Vaya susto, pensé, y del susto me salí del agua.
Al final comimos ahí y fue divertido y también asustadizo. Volvimos muy tarde y nos echamos a las doce y media.

El Pantano de la TranqueraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora