Infierno.
Mucas personas al pensar en ese término se refieren al inframundo; fuego, demonios y esclavitud.
Ese no es exactamente el mío.
Cada persona tiene su propio infierno, ya sea en su casa, con sus padres, con sus hermanos... Ya sea con sus parejas, en su trabajo, donde sea.
Mi infierno, es la escuela. Nunca fui aceptado, por nadie.
Me dirán "Hey solo tienes que ser un poco mas social" pero ese no es el caso. No se por qué pero siempre he espantado a las personas, en mi vida he tenido un mísero amigo.
Nací, viviré y moriré como un perdedor.
Hoy es mi primer día en mi nueva escuela, ya teniendo el presentimiento de que nada iba a mejorar en cuanto a mi status social. Seguramente pase las clases sentado y callado sin hacer nada, y los almuerzos en la típica mesa sentado con come-libros, chupa-medias y simplemente antisociales y autistas.
No quería. Quería quedarme en casa, quería que mi madre comprendiera cuanto sufría mi infierno, cuan mal me sentía al ser excluído por todo el mundo.
Soy Luke Hemmings, y soy un perdedor.
