"La Rosa de los vientos "

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La Rosa de los Vientos

1. Náufrago de un barco llamado Infancia.

La infancia es ese momento íntimo en el que comienzas a utilizar los sueños como brújula o como faro que indican el angosto camino hacia el mar de la libertad, de la juventud, de la magia. Realmente, para llegar a la fuente de la juventud Ponce de León no utilizó ni las coordenadas adecuadas ni el periodo del día correcto, pues es la noche y no el día, son los sueños y no la realidad ,los que otorgan esa agua bendita de la inmortalidad del alma.

Eternamente jóvenes. Eternamente piratas. Eternamente eternos. Este era el lema de mi compañía de aventureros inundados o sumergidos por el espíritu de la fantasía y de la magia. Nuestras armas no eran tan afiladas como las de una espada pero sus astillas eran mil veces peores pues penetraban en la carne e incordiaban como una mosca de campo cojonera. Estaba orgulloso de pertenecer a esa tripulación de borrachos y valientes prófugos de esa sociedad inmunda. Lo cierto es que tras la puesta de Sol, nuestro escondite se convertía en uno de los mayores eventos festivos que jamás se han divisado por las tierras de Sevilla. Zumos de toda clase de sabores, refrescos gaseosos e incluso, de vez en cuando, salchichón y mantequilla para acompañar esas sabrosas bebidas que constituían parte de nuestro banquete.

La tripulación de la Rosa de los Vientos nos hacíamos llamar. ¡Qué curioso! Es precisamente el sentido de la orientación el que flaqueaba entre nuestra gente. El capitán fue quien bautizó a nuestra tripulación con ese nombre ya que poseía un dibujo en su hombro con esa forma. El motivo fundamental de ser capitán era precisamente ese: había sido capaz de soportar el eterno dolor de una punzante aguja y de la turbia tinta. Con el tiempo descubrimos, Alonso y yo, que se trataba de un tatuaje-pegatina, como lo llamábamos nosotros, que había conseguido en una bolsa de patatas fritas.

Mi padre fue el que construyó una especie de balsa que, muy probablemente, por el aspecto tan diminuto que presentaba, daba la impresión de ser la bañera de un gnomo. Todos dentro de nuestro código de piratería debíamos comprometernos y firmar con un escupitinajo, por supuesto, que nuestras promesas jamás se verían incumplidas.

Además, el capitán, Robert, asignaba a cada miembro su labor correspondiente: Alonso era el timonero. Por sorprendente que parezca, nuestra inocente ceguera nos hacía pensar que un plato de porcelana era capaz de guiar a nuestro sorprendente e inquietante navío. Migue era el segundo de abordo. Repetía de un modo recurrente todas las frases del capitán. Además, mis recuerdos alojan la imagen de un pequeño periquito verde sobre su hombro izquierdo cuya docilidad era el resultado de un severo adiestramiento. Su padre trabajaba en un circo como adiestrador de animales y un periquito no suponía un gran reto al lado de los enormes tigres y leones que conseguía domar. Luego, con el tiempo, mi padre me desveló la verdad sobre su arriesgado trabajo: Las fieras que domaba poseían muy malas pulgas (nunca mejor dicho).

Dionisio era el guerrero más feroz. Poseía un complejo tirachinas formado, exclusivamente, por un globo y la parte superior de una botella de plástico. Aunque eso sí, era el más gordito de todos. Su pelirroja cabellera le proporcionó el apodo de "El Remolacho". Ibáñez era el miembro más cómico y gracioso del grupo. No mentiría si dijese que sus poros supuraban alegría, felicidad y una crueldad sobrehumana para elaborar complejas burlas y mofas. Finalmente, la tripulación finalizaba con el explorador Rubén, es decir, conmigo. El cargo que en mí recaía consistía en comprobar y explorar aquellas áreas que podía resultar un peligro para nuestra compañía de camaradas.

La compañía o la tripulación de la Rosa de los Vientos poseía una grotesca y peculiar característica: Era una embarcación de agua dulce (provisionalmente). Sevilla no es una ciudad muy marítima que digamos. Para apreciar algún tipo de agua salada en la calurosa capital de Andalucía debía ocurrir un milagro. Eso o que alguien orinara río arriba.

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⏰ Última actualización: Jul 31, 2015 ⏰

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