*chico lindo*- este dolor de cabeza me esta matando...- alardeé-.
Puse mis brazos cruzados sobre mi pupitre y recoste mi cabeza.
Aún lado de mí, sentada en otro pupitre se encontraba mi mejor amiga, prácticamente desde que éramos unos fetos, Olivia.
- ¡Ya sé! ¡hagamos una pillamada en tu casa!- motivó Olivia-.
- Oli - la miré- ¿Qué parte de 'dolor de cabeza' no entendiste?-
- No debiste beber tanto...-
- ¡Yo nisiquera bebo!- objeté-.
- No, todavía...-
- ¡y tampoco lo haré!-
- ¡Eso es! ¡mejor vamos a una fiesta!- invitó Oli-.
- Creo que enserio, no entiendes- la miré-.
Mi cabeza palpitaba.
- Oh por dios, Julie... - sorprendió mi amiga tomando fuertemente mi cabeza-.
- ¡Auch! ¿Qué sucede?-.
Levante despacio mi cara, por el punzante dolor de craneo que tenia. ¡Maldita jaqueca!
Dirigí mi vista a todos lados buscando algo que llamara la atención.
Pero nada.
- ¿Qué es lo que tengo que mirar exactamente?- pregunté
- ¡No me digas que no lo ves!-
Volví a mirar hacia todos lados.
El salón tenía la mitad de los estudiantes dentro.
Asi que solo veía a varios grupos de chicas y chicos hablando tonterías, y alguno que otro gritando y haciéndo escándalo.
Ví a una chica castaña de mechas rubias que estaba gritando, mientras corría de un chico flacucho pelinegro que le lanzaba agua.
- ¿A esa rubia gritona?-
- ¿Qué? ¡No!- me miró incrédula mi amiga- me refiero a ese chico de allá-
Apunto a la puerta del salón.
Y lo ví.
Me quede enbobada viendo tal perfección. Era realmente el chico más guapo que he visto en mi vida.
Tenía el pelo castaño, ojos miel y era bastante formado, pero no exagerado. Como delgado, pero no escuálido. Se le marcaban algunos músculos, como los brazos y el abdomen.
Lo noté por el suéter delgado color celeste verdoso, además tenía puesto unos jeans negros.Y ese trasero... ¡Dios! ¡para morirse!
- Ah...- miré a Oli que también estaba embobada con él-
- ¡Ay, por Dios! ¿ya lo viste?- preguntó un tanto no silenciosamente.
Volteé mi cabeza. Nos habíamos ganado unas cuantas miradas de algunas chicas igual de embobadas que nosotras, además de otras miradas incrédulas de chicos.
- Ni que estuviera tan bueno... - lo miré
Ni yo misma me lo creía.
Recibí la mirada de '¿Qué?' De mi amiga.
Me causó sensación de risa, pero me contuve.
- Es decir, ¿Qué le ves de especial? Hay chicos mejores...- respondí
Definitivamente no los hay.
acomodando mis cosas sobre la mesa y preparandome mentalmente para dos eternas horas de clase, abrí mi libreta y anote la fecha.
- Es que no lo estas viéndo bien...- concluyó mi amiga-.
El lindo chico seguía de pie frente a la puerta, pero no alcanzó a pasar ni un minuto antes de que detrás de ese Dios griego entrara nuestra querida profesora. Notese mi sarcasmo.
- Mira ya lo viste... es tan tierno- admiró Oli de nuevo-.
- Que sí-
Bufé.
El chico en serio que era tierno y todo.
Pero es que, ¡Oli se pasa!Estoy segura de que si escucho otro suspiro de ella por el chico ese, la golpeo.
Levanté mi vista y note que Srta. Roan se dedicaba a hablar animadamente con el chico ese.
- Aparte de lindo... -
- ¡Ya callate!- objeté con cara de pocos amigos-.
- Vale, vale... - escuché la risas de Oli-.
- ¡Fóllatelo y ya esta!-
- No funciona así...- se quejó Oli-.
Olivia era una chica morena, alta, tenía buen cuerpo y tenía ojos mieles.
Yo podía decir que mi amiga era una de las chicas más deseadas del instituto.
Así que más de alguna vez jugó con el corazón de algún chico.- ¿Qué quieres decir?- pregunté
Oli se silencio y bajo su cara al pupitre, pero yo la conocía tanto que sabía que si bajaba la cara era porque intentaba ocultarme algo.
- Oli...- la llamé acusatoriamente
Levantó su cara y me miró con ojos de gatito.
- ¿Qué sucede Oli? Sabes que puedes decirme-.
- Esque estuve pensando que... quiero tener algo serio-.
- ¿Algo serio?- repetí
- Sí, ya sé que es raro, pero... me aburrí de jugar y andar por ahí sin engancharme de nadie. Quiero tener novio- concluyó
La miré y solo supe responder- ¿Con él?-
Osea no puede ser que Oli vaya a ir enserio con él.
Es decir, ¡No puede!
¿Acabo de encontrar lindo al futuro novio de mi mejor amiga?
- Sí, ¿porque no?- respondió
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Cadenas Para Pasajeros
Random- sólo,no juegues con ella. - No quiero hacerlo... tengo algo más de que preocuparme. - ¡Más te vale! - grité- - ¿Cuál es tu problema, rubia? ¿Es porque no quiero jugar contigo? - respondió sonriendo de lado-. - Que estupideces dices, bastardo ¡No...