CURIOSITY - Two/Shot F(X)

Cao 2 Final

Los ojos de la rubia se le iluminaron, recorrió con su vista de arriba abajo tres veces el cuerpo de la menor, su piel era blanca, y parecía tan delicada como la de un bebe. Amber quería saber si en verdad se sentía así. Observo el sostén de la chica, azul zafiro y con una delgada malla, apenas y si cubría parte de su pecho, para ser exactos sus pezones. Trago saliva cuando escuchó a la contraria decirle "quítamelo" Se refería a su sostén.

Pero aquella no lo hiso, acaricio su cabello hasta llegar a su oreja, comenzó a sobarla lentamente, y eso provocó una corriente eléctrica en todo el cuerpo de Krystal; No aguantaron la ansiedad de probar de nuevo de sus bocas, Amber separo sus labios para comenzar a besar y lamer su quijada, suspiro cuando llegó a su cuello y luego lo succiono... llego a la clavícula y sus manos no se quedaron quietas, mientras sus labios se encargaban de esa parte, sus manos se posaron en sus hombros, con sus dedos empezó a bajar la tira del sostén. Krystal jadeaba, sus manos estaban sosteniendo la cintura de la rubia, no resistiendo mas, despojo aquella blusa ancha que cubría el cuerpo de la mayor, sorprendiéndose de ver sus senos al aire libre. Su piel era un poco mas oscura que la de ella, pero siendo sincera lo que ella no dejaba de ver eran aquellos botoncitos color oscuros que en un par de minutos estaban duros. El rostro de Krystal se torno rosado de la vergüenza, pensó que fue muy rápido hacer eso, pero a Amber eso no le importaba, antes la menor le había hecho un favor... Ella estaba caliente, sentía su cuerpo arder, no tardo y segundos también dejo a su vista los pechos de la menor, quien por instinto rápidamente se cubrió con las manos.

-No tienes por que avergonzarte, eres hermosa

-Eso dicen todos

-Bueno, pues todo tienen razón - Con lentitud fue separando los brazos de sus senos, para poder verlos mejor – Déjame enseñarte los placeres de la vida, mi querida Krystal - Se relamió los labios y se inclino a la altura de aquellos hermosos senos ante sus ojos, poso sus labios en medio de su pecho y dio un dulce beso, poco a poco fue dejando caer el peso de ella sobre la pelinegra, haciendo que esta quedara acosta en la cama, una de sus manos se que en su cintura, mientras que la otra tocaba libremente su cuerpo, llegando a sus pezón derecho, para luego acariciarlo con los dedos, primero solo lo rosaba con la yema de sus dedos y luego con delicadeza fue cerrando sus dedos índice y pulgar sobre aquel pezón, estimulándolo y dándole placer a la menor; Claramente el otro también necesitaba atención, y Amber no dudo en cubrir aquel pezón libre con su boca, llenándolo de saliva y luego succionándolo, dando pequeños y suaves mordiscos en el, Krystal mordía su labio inferior , nuevamente sentía rico, era maravilloso lo que la lengua de la mayor le hacía sentir.

Y eso era solo el comienzo.

Unos minutos más tarde, los labios y lengua de Amber recorrieron el abdomen de la joven, sus manos no se quedaban quietas, quería tocar y explorar cada parte de su delgado cuerpo, paso las palmas de sus manos por las piernas de Krystal, hasta nuevamente llegar bajo la falda y tocar aquel hilo que cubría su intimidad, rápidamente pero no con desespero se los fue quitando. Separo las largas piernas para poder acomodarse mejor entre ellas, repartió besos en sus muslos. Un "¡¡Ahh!!" escucharon sus oídos, la pelinegra soltó un pequeño pero audible gemido cuando sintió el aliento de la contraria cerca a su sexo, arqueó la espalda cuando sintió sus labios en ella, la mayor le indico que flexionara un poco las piernas y también que las separara, Amber puso sus manos en aquellas hermosas rodillas para evitar que cerrara las piernas, nuevamente se inclino en aquella zona, pero la estorbosa falda no la dejaba hacer mucho, sin permiso, despojo la última prenda de la menor, luego volvió a la posición anterior. Su rostro se veía fascinado al ver que no había ni un rastro de vello en aquella zona, hacia parecer como si fuera aún una niña y eso le pareció excitante. Comenzó a repartir besos cortos y luego lamidas, separo los labios de esta e introdujo su lengua.