Es hora de irme, ya entregue los pedidos- pienso.
Camino hacia la avenida y siento como pasa una bicicleta junto a mi, volteo a mirar, y no encuentro nada, solo una carta en el suelo. La agarro y le echo un vistazo, dice: -''Gracias, buen viaje''-, he quedado asombrado, siento que alguien me sigue, -¿Me estaré volviendo loco?- Duro 6 o 7 minutos con mi cerebro dando vueltas, -¿Y ahora que hago?- Trato de seguir adelante.
Subo al autobús, esta vez no tan lleno, me siento en la silla mas cercana a la puerta, veo a través de las ventanas a una chica, encerrada, secuestrada. Grito a todos, pero nadie me escucha, el autobús se mueve pero ella sigue ahí, golpeo la ventanilla en donde esta el conductor, pero no me escucha, trato de abrir la puerta del autobús, y al conseguirlo salto.
- Joven
-Joveeen! - grita
-Oiga Joven, estamos en el paradero de los autobuses, se ha quedado dormido.
-Lo siento, ya me voy. - digo enojado
No sé que esta pasando, ¿eso que significó?- me siento en un banco, y recuerdo todo lo que pasó. Decido ir a casa, prefiero pensar sobre esto allá.