Capítulo 18: Pronto Lo Sabre

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No lo podía creer, definitivamente no lo podía creer. No esperaba estar metida en esto en este lugar. Al parecer estar con Keyler tenia sus ventajas

- _____, es en este lugar en el que me gusta estar - Keyler llamó mi atención pero no lo voltee a mirar, mi vista estaba enfocada en todos y cada uno de los cuerpos que se encontraban en frente mio, aquellos chicos que estaban sobre sus motos, aquellas chicas que al parecer sólo tenia ropa interior puesta y en el fuerte sonido que provocaba la musica a través de los parlantes - ______, ¿alguna vez has competido en las correrás clandestinas?

Mire a Keyler con una sonrisa en mi rostro

- Bueno, nunca he competido en las carreras de siameses con un hombre - Me limite a decir y Keyler me sonrió devuelta

- Bueno, no creó que esta noche hagas eso

Puse mala cara por su comentario y el soltó una breve risa

- Bueno, esta bien - Me cruce de brazos como niña rebelde que soy - Al menos estaciona la moto cerca

Keyler encendió nuevamente la moto y antes de arrancar dijo

- No te dejare que compitas en las carreras de siameses _____ - Su tono autoritario me hizo entender que no me iba a dejar por mas que yo hiciera berrinche por ello

- Esta bien, no competire en esas carreras - Keyler acelero y mis manos volaron a su cintura, sentí como sus hombros se pusieron rígidos y su espalda un poco mas recta. Quite mis manos de su cintura y las deje sobre mi muslo

Keyler estaciono su moto cerca de las otras. Baje de la moto y Keyler hizo lo mismo. Dirigí mi vista a todo lo que me estaba rodeando, sentí la anatomía de Keyler justo detrás de mi, su respiración regular chocaba contra mi, la sentía caliente y de un momento a otro se volvió pausada y forzosa, estaba respirando pesadamente

¿A este chico que le sucede?

Sentí como Keyler agarro mi brazo y me hizo a un lado, no entendía su gestó

¿Tal vez quiera marcar la diferencia de estatura?

Iba a renegar si se traba por la diferencia de estatura, mi 1.75 era alto, aquí todas las mujeres eran unas enanas, no era mi culpa que los hombres fueran unas varas, unas varas con musculo, bueno algunos. Estaba apuntó de abrir mi boca y decir que no podía humillarme por mi estatura porque yo era alta, hasta que un chico abrió su boca primero que yo

- ¡Viejo Keyler! - Grito un chico a través de la musica y el ruido que provocaban los motores de los carros y motos

- Alex - Keyler simplemente se limito a decir, (creó que su nombre) en medio de un gruñido

- ¿Que es lo que te trae por aquí? - El tal Alex había bajado el volumen de su voz una vez se puso enfrente de Keyler

- Nada que interese - Keyler elevo brevemente sus hombros mientras cruzaba sus brazoz sobre su pecho

El que se hacia llamar Alex sonrió y volteo dándole la espalda a Keyler, puso sus manos alrededor de su boca y grito

- ¡Hey chicos, la leyenda ha vuelto! - Su grito había salido potente y una manada de chicos habían volteado a su encuentro. La música, los motores y los gritos se habían detenido, practicante todos habían volteado a mirar a donde había provenido el grito, pero nadie miraba al dueño de el, sino que sus miradas iban mas allá del chico. Sus miradas estaban centradas en Keyler

Mi Oscuro PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora