Cap. 1

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Ethan

6:20 de la mañana, miro de reojo el despertador le doy a silenciar y de nuevo me sumerjo en la cobija, a esta hora soy más sueño que persona, mi plan de hace 5 minutos ha cambiado de dormir media hora más a levantarme y cumplir mi parte del trato que consiste en tener que limpiar la cochera.
Aura no esta y puedo cumplir con mi parte del trato antes de que regrese, es la mejor; es tan impresionante que pudiendo ser ella mi progenitora no lo sea, sus ojos color verde son fascinantes, no suele arreglarse mucho y siempre luce espectacular, es la persona mas dulce que he conocido y ahora sí a comenzar mi san lunes de extrema flojera, lo principal es darme  una larga ducha, la mayoría de los chicos de clase han de traer una resaca de los mil demonios, hoy me decidí por unos vaqueros negros, camiseta blanca, y botas negras, así es siempre blanco y negro, gris y blanco, azul marino y blanco, pero de ahí no pasa, mi aseo personal no me lleva ni 10 minutos, mi cabello siempre ha sido un desastre y la verdad es que no me importa mucho, la cera ayuda demasiado cuando llevo prisa, al cabo de media hora he terminado de limpiar la cochera y.. demasiado tarde ¡Joder!. Voy hacia la cocina y hoy a diferencia de otros días tengo que hacer yo el desayuno.

- ¡Otro jodido día de clases!-

Realmente Cooper es un amigo que no encuentras en cualquier lado un día lo quieres abofetar y al otro agradeces por ser como un hermano, he tenido su amistad desde que tengo uso de razón.

- Tranquilo viejo - le doy un golpecito en el hombro a lo que finge un gesto de dolor. Toda la clase la pasamos desapercibida hasta que la directora entro al salón para presentarnos a ¿Kennedy? ¿Madison? como sea que se llame, no le tomo importancia aqui la cuestión es que lleva alrededor de 25 minutos hablando y esto no ayuda en nada a que tengo sueño y esta chica no se calla. Lo que he de agradecer es que si esta buena esos vaqueros skinny le van bien con ese jersey cuello v azul marino, tez blanca cabello castaño, y trasero respingon, todo bien si lo vemos por ese lado.

-Que alguien la calle por favor- estrecho mi mano en mi cara, estoy irritado.

- No exageres, te apuesto que ya terminó su diálogo no le tomes mucha importancia da gracias que tarda en hablar y podemos observar su lindo trasero.-

Me rio ante el ultimo comentario al menos no soy el unico que cree que esta buena, ¿ven? a eso le llamo yo ser mejores amigos y aunque me cuesta admitirlo... tiene razón de no ser por su recital de casi 40 minutos la clase hubiese sido demasiado aburrida. Cooper me pregunta por sus posibilidades de que esa chica le de su numero de celular y como he de saber es un tío que solo la quiere para un polvo nada mas, no le van las relaciones serias. Después de escuchar lo que la profesora thompson pidió como tarea salimos hacia la cafetería y para mi suerte la que me atiende es Vanessa.

-Hola Ethan, no pensaba verte por aquí... - me guiña un ojo.

-Sabes que paso por aquí todos los dias, ¿por que te sorprende?- le respondo con indiferencia.

Me he enrollado con ella un par de veces pero nada más, le deje de ver cuando me pidió  que la llevara a casa a conocer a mi familia.

-Tal vez porque hace mucho que me estas evitando, ya te olvidaste de mi?- se recarga en la barra dejándome ver sus atributos, me provoca un malestar a lo que la ignoro y respondo: -No para nada, solo que he estado ocupado con el equipo-.

-Y si es asi ¿cuando me invitas a tu casa? Quiero conocer a quienes serán mi familia en unos años- me sonríe de forma seductora mientras lame su labio inferior.

Esto de verdad me cabrea aun más, Vanessa y yo pudimos haber sido algo mas pero es una chica que no entiende que no la llevaré a casa nunca, no tengo familia y sinceramente no estoy preparado para algo mas formal ni lo estare jamas. Se que Coop esta al tanto de la conversación por lo que interviene.

- Hey! tio tenemos que irnos ya...- pone su mano en mi hombro y mi reacción es instantánea que no me doy cuenta cuando quito su mano de encima y camino hacia el campo de béisbol...- Ethan!- escucho que grita mi nombre pero lo ignoro y como un videoclip mi madre, Charlotte, mi padre, todos ellos sin vida, odio los recuerdos que me produce la mente, y en cuanto caigo en lo que ha sucedido doy la vuelta y escucho un cuerpo azotado en el césped.

-¡Mierda!- Era justamente ella, la chica nueva -¿Estás bien?.

-Lo estaría si no fueras tan idiota al caminar- me responde con una sonrisa fingida mientras se sacude los vaqueros.

- ¡Oye! tranquila fue un accidente, no es para tanto, no te pongas histérica ¿vale?.
Esta la mujercita salió  además de linda, contestona.

- ¿Disculpa? - Arqueó la ceja y me sonrió de esa manera cínica tan propia.

- Que no seas histérica, no vas a morir por caer al suelo, o acaso es que estás lamentándote  qué no caí encima de tí o tú de mí? como en las películas que de seguro te gustan ver.- Esta situación me gusta, está ruborizada y no se si es por vergüenza o si esta cabreada. - Y bien... Ya pensaste cuál de las dos es la mejor opción?.-

-¡Vete a la mierda! Ni en tus sueños va a pasar.- Se reincorpora y se sacude el polvo.

-¿Qué dijiste?. Me acerco a ella y la cojo del brazo ejerciendo fuerza hasta que articula un gesto de dolor. -¿Que cojones te sucede me estás lastimando; suéltame?!. - Sus lagunas, no había notado que son grises azulados y con bordes gruesos y largos color negro. Es magnífico que ni siquiera recordaba que la tenia del brazo y cuando por fin reacciono miro mi mano sobre su brazo y la suelto, a nuestro alrededor estaban unas cuantas personas que me miraban como un extraño golpeador de mujeres. -Lo siento- sigo mi camino, mis ganas de estrellar mi puño en la cara de quien sea aumenta cada segundo más.

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