-Sabes que yo odio a los otakus.-Sentí como me dejaba helada, sin palabras...no sabía que pensar el solo me miraba con una mirada fría o al menos eso sentía yo
-¿Entonces?, eso significa que nuestra amistad no puede ser...-Lo que menos temía, lo que no quería pensar.
-No lose, me agradas pero quiero tomarme un tiempo para procesar todo esto, no puedo creer que eres una otaku.-El solo termino de decir eso y me dio la espalda mientras que caminaba para la salida, yo solo me quede ahí parada.
Sin pensar me fui corriendo hacia la salida y corrí lo más rápido para llegar al departamento de misaki al llegar a su puerta toque el timbre como si hubiera una invasión zombi detrás de mí, misaki abrió la puerta y solo llevaba en un short negro y una blusa larga que le llegaba hasta los muslos, su cabello despeinado y sus lentes.
-Senpai [1].-Dije eso y me lance a ella.
-¿Que a pasado kohai [2]?.-Dijo preocupada mientras intentaba pararse y ponerse bien sus lentes.
-¿Soy rara verdad?, Porque realmente no se qué hacer para agradarle a nathan era la única persona con el que podía hablar normalmente y no me mire raro, ¿Qué hago?.-Dije con cierta tristeza y agache mi cabeza
-Si eres rara pero eso te hace ser especial, le puedes agradar siendo tal cual cómo eres y si él dice que no te va aceptar como eres, ni modo tienes personas más verdaderas a tu lado.-Ella sonríe y me ayuda a levantarme y prepara café para que le cuente lo ocurrido.
Al contarle lo ocurrido solo se queda seria, repite las mismas palabras y solo me dice que estará bien y que vaya a casa ya que tengo dos días sin ir ya que me había quedado a dormir en la casa de sempai. Tomo mi mochila y me fui de allí, tome el camino más largo para poder pensar mientras que a la vez pensaba en que Bigbang [3] se iba a separar aunque solo sea por un tiempo pero era frustran te. En otra parte nathan está sentado en una banca de un parque refregándose la cabeza pensando en su amistad con Maho, pensando en que le dirá el tenia un cierto odio a las otakus por una situación vieja cuando era más chico el solo quería su amistad con esa chica tan linda pero que podía hacer dejar su odio y cambiar o dejar a su amiga. Por otra parte Maho iba llegando a su casa al abrir la puerta vio a su mama en la cocina con alegría fue corriendo a abrazarla.
-¡Maho!, ¿Ya habías llegado?-Sorprendida dejo el plato en la mesa para abrazar a su hija.-Pensé que te quedarías más tiempo con misaki.-Acabo de llegar de hecho, ¿Extrañaste mi rareza?, ¿Noticias?-Dije sonriendo separándome de mi mama para ir a tomar agua.
-Claro que lo haría, mm cuando hablas de noticias espero que te lo tomes bien.-Suspiro al decir eso mientras caminaba de un lado a otro, pensando en que palabras decir, suspiro una vez más para decir lo que temía.-Voy tener que regresar a mi país natal ya que me ofrecieron un trabajo muy bien pagado y tu padre...supongo que entenderás que el ya nunca volverá con nosotros a sí que esta es la pregunta, Vienes conmigo a mi país e inicias una nueva vida o te quedas aquí en Japón, tú decides.
-No me hagas decidir esto.-no podía pensar o bueno ahora mismo estoy haciendo eso pero realmente no puedo creer que me haga decidir esto llevo viviendo en Japón desde hace 10 años para mi México ya no era mi país natal aunque no tenia los rasgos de mi mama yo me veo igual que papa, mi papa es japonés pero después de lo que paso la anterior noche se fue a corea y nos ha dejado.
-Entonces, ¿Que decides?
-Mama sabes que te quiero demasiado pero haya no hay algo para mí, me mirarían raro y de igual manera ellos no me entenderían como lo hacen acá, las costumbres allá son raras, la comida es diferente, la ropa, mi vida, personas, todo será diferente para mi si me fuera, así que me quedare en Japón.-Suspire abrazándola.
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Enamorado de una otaku [CANCELADO]
Roman d'amourEn el mundo del manga la chica perfecta, la chica linda y adorable, la chica que consigue todo, la chica que es amada y odiada tanto de chicos como las chicas por salir con aquel idol, todo lo que una chica de los mangas tiene, Ah sierto, esta no es...